El Departamento de Estado de Estados Unidos advierte en su último informe relativo al terrorismo de que la ubicación de España la convierte en "paso estratégico para grupos terroristas internacionales", al tiempo que recoge los avances recientes logrados en la materia.

El informe anual Country Reports on Terrorism, cuya versión relativa a 2009 se ha publicado este jueves, realiza un repaso detallado de la situación de seguridad de gran parte de países e incluye entre ellos a España, del que destaca que durante el año pasado siguió sufriendo tanto el terrorismo islamista como el de ETA.

En este sentido, el Departamento de Estado reconoce que España es foco de riesgo del islamismo radical, como quedaría de manifiesto en el lenguaje de las milicias radicales que llaman a "recuperar" la Península Ibérica o la "liberación" de Ceuta y Melilla. Parte de esta "preocupación" guardaría relación con la cada vez mayor actividad en África de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), autora del secuestro de tres cooperantes españoles en noviembre del año pasado.

A ello se añade, según Washington, que "la localización geográfica de España y su alta población inmigrante procedente del norte de África y el sur de Asia, unido a la facilidad de tránsito hacia otros países europeos, la convierte en un paso estratégico para grupos terroristas internacionales". "España sigue siendo una base importante de tránsito, recaudación y logística para organizaciones terroristas que operan en el oeste de Europa", advierte el informe.

Como rasgo positivo, el Departamento subraya la "agresiva" persecución emprendida por las fuerzas españolas contra estas redes delictivas e indica que la Justicia está "activa" en su lucha contra el terrorismo islamista.

Para el Departamento de Estado, resulta "destacable" el cambio de gobierno registrado en el País Vasco y que ha supuesto la histórica llegada al poder del PSOE en detrimento del PNV, por primera vez "en casi tres décadas". De la nueva administración señala que "ha implantado una política contra el terrorismo más inequívoca para enfrentarse a ETA".

En los avances en la lucha contra ETA también han contribuido, según el informe, que España haya "intensificado" su cooperación con Francia, lo que ha puesto una "presión considerable" sobre la banda. 

 "Las operaciones conjuntas con Francia permitieron, entre otros éxitos, la detención del presunto jefe militar y del supuesto jefe político (de ETA), quien también ejercería como jefe de comunicaciones", explica el documento, que también hace referencia a esta cooperación entre los dos países en la parte dedicada a Francia.

El Departamento recoge que en 2009, hasta mediados de diciembre, España detuvo a 124 presuntos etarras, de los cuales 31 fueron arrestados gracias a la colaboración gala.

Asimismo, el Ministerio que lidera Hillary Clinton también indica que Estados Unidos y España mantienen una "cooperación estrecha" para "investigar y perseguir actos de terrorismo, impedir futuros ataques" y desmontar "acciones terroristas que podrían estar dirigidas contra intereses estadounidenses".

El documento norteamericano aplaude varias iniciativas legales adoptadas por el Gobierno español y cita como ejemplos el aumento de penas para los cargos de apología del terrorismo, así como para aquellos relativos al "reclutamiento, el adoctrinamiento o la financiación de terroristas".

En este último punto, se alaba la "postura inteligente" que mantiene el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, al entender que ha "trabajado duro" para frenar el acceso del entorno de ETA a las instituciones. En este sentido, explica que España, como miembro del Grupo de Acción Antiterrorista del G-8 "ha proporcionado asistencia técnica a otros países para ayudar a que sus instituciones combatan el terrorismo". Además, alude a los esfuerzos "exhaustivos y eficaces" de España en relación a la lucha contra el blanqueo de capitales.