Sólo uno de los diputados de UPN en el Congreso votó ayer a favor de la enmienda a la totalidad del PP al proyecto de Presupuestos, y la formación que dirige Mariano Rajoy tardó pocos minutos en enviar un comunicado anunciado que el PP "suspende sus relaciones con la actual Dirección de UPN". Mientras, el diputado díscolo de la formación navarra, Santiago Cervera, justificó su actitud en la necesidad de "recomponer" las relaciones entre ambos partidos. Una relación que, según la vicepresidenta de UPN, Yolanda Barcina, "no está rota".

El PP mostró su "gratitud" hacia Cervera por seguir el sentido de voto del Grupo Popular ya que su "postura es plenamente respetuosa con el acuerdo suscrito en 1991". "Y es, además, fiel intérprete del sentir de los navarros, que nos dieron su confianza mayoritaria en las pasadas elecciones. Su actitud, adoptada en momentos complejos para todos, le honra", afirmó el PP en una nota.

A continuación, el PP lamenta la posición adoptada en torno a los PGE por UPN "a propuesta de su presidente, Miguel Sanz", ya que "suponen una ruptura unilateral de los acuerdos suscritos" hace 17 años". "El PP no puede aceptar que UPN decida en cada momento cuál es su posición en las instituciones nacionales al margen de los acuerdos suscritos con nuestra organización", señala el comunicado. Tras afirmar que "corresponde a UPN manifestar su voluntad inequívoca sobre la continuidad del pacto, así como ofrecer garantías para su pleno cumplimiento", el PP advierte que, "de no ser así", se pondrá en marcha "tener presencia ante la sociedad Navarra". El PP explica además que "no se plantea abrir expediente de expulsión" a Carlos Salvador, "que será sancionado por incumplir la disciplina de voto", pero pide "prudencia, serenidad y responsabilidad" para no sancionar a los que han defendido" el pacto suscrito en 1991.

Rajoy eludió opinar sobre este asunto pese a la insistencia de los medios. Todo lo contrario que hizo Cervera, que convocó una rueda de prensa para explicar que su voto era "irrelevante" toda vez que los números ya estaban asegurados, pero que sí era "relevante" para "mantener" el acuerdo entre PP y UPN, "esencialmente importante" para la formación navarra, porque le ha permitido "tener hegemonía en la comunidad foral y una proyección en la política nacional".

Cervera, ante la posibilidad de que su formación le abra expediente, esgrimió el artículo 67.2 de la Constitución -los diputados y senadores no pueden estar vinculados a mandato imperativo-, al tiempo que aclaró que no piensa renunciar a su escaño en el Congreso.

Carlos Salvador, que sí se abstuvo, llamó a la reflexión entre su formación y el PP para que ninguna de las decisiones que se adopten sea "irreversible". Salvador garantizó que hará todo lo que esté en su mano para que ambas recuperen una relación que "siempre ha dado buenos frutos".

Desde UPN, cuyo Comité Ejecutivo analizará el lunes la situación, Barcina consideró que podrán seguir trabajando con el PP en un futuro en la línea que marcó el Consejo Político y "que es que UPN es un partido diferente al PP, con autonomía propia, pero que quiere seguir con el pacto". La formación navarra espera que el PP "determine el alcance de esa suspensión y notifique si ello supone una revisión del pacto de 1991.