MANUEL ORTA | CANTANTE

"Quiero morir cantando porque el escenario me da vida"

  • El cantante dice que no entiende su vida sin la música a la que lleva dedicándose desde los seis años.

A los seis años recibió su primer premio como cantaor en un concurso que, en su localidad natal de La Rinconada (Sevilla), supuso su primer contacto con el espectáculo. Desde entonces, Manuel Orta ha ido forjando una trayectoria de grandes éxitos tanto con la interpretación de sevillanas como con la versión de temas de figuras con el nivel de Rocío Jurado de la que, en Así soy yo, incluye la revisión de Como las alas al viento y Punto de partida. Es el presente de alguien que no entiende la vida sin la música.

-¿Cómo lo ha hecho para mantenerse en un lugar tan privilegiado durante tanto tiempo?

-Lo llevo dentro. Es mi trabajo. Sé que, si no me cuido yo, ¿quién lo hará? Ésta es una profesión de trasnochar pero debes tener claro dónde estás y permanecer en guardia las 24 horas del día. Sacas un disco todas las temporadas, viene la promoción, las galas y, en Agosto, ya estás preparando los próximos temas. En realidad, nunca se para.

-A usted le gusta encargarse personalmente de todos los detalles, ¿verdad?

-Sí. Hago hasta los diseños estéticos de los discos. En éste, por ejemplo, llevo una foto con una cruz de palo que me hizo mi padre antes de morir y que siempre me acompaña. A la mayoría de los artistas les dan las canciones, la ropa... Yo no y, para mí, es la única manera de no quedarme atrás.

-Y Manuel Orta cuando se baja de los escenarios, ¿cambia mucho?

-¡Qué va! Soy una persona sencilla. No voy de Manolo Orta por ahí. Mi signo es Virgo y me considero muy tímido, ordenado y alguien a quien le gustan los olores buenos. Aparento una cosa que no se corresponde con la realidad.

-¿Cuándo fue la última vez que se emocionó?

-Cuando ponen imágenes de Haití. Mis niños me riñen con eso…

-Ya es hasta abuelo, ¿no?

-Efectivamente. Tengo un "rubio" de tres años y, ¡si lo vieras cómo maneja la guitarra y el cajón! Está claro que lo trae en la sangre.

-¿Piensa que es más importante una gran voz o la interpretación?

-Igual que con el balón o una muleta, transmitir es una cosa, y sólo cantar, otra. Si no actuase, me pasaría igual que un pajarito mudo. Quiero morir cantando porque, el escenario, me da vida.

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