Granada

La Policía Local judicial sufre un ataque informático que destruye sus archivos

  • El Ayuntamiento ha abierto una investigación para aclarar quién y cómo se manipularon los ordenadores

La Policía Local de Granada mantiene una unidad adscrita a los Juzgados, ubicada en La Caleta.

La Policía Local de Granada mantiene una unidad adscrita a los Juzgados, ubicada en La Caleta. / g. h.

La oficina judicial que la Policía Local tiene en la sede de La Caleta ha sufrido un ataque informático con consecuencias importantes, pues se ha destruido toda la información y los archivos que almacenaba en su red interna y de los que no se han localizado copias de seguridad. Solo han quedado las copias en papel.

El Ayuntamiento de Granada ha ordenado abrir una investigación a fondo sobre este incidente ocurrido a finales del año pasado. Según fuentes policiales, los primeros análisis constatan que se trata de un virus informático que pudo llegar a la red del sistema a través de uno de los ordenadores, al que tenían acceso 4 de los 8 agentes de la unidad.Los usuarios alertaron de la incidencia a la central policial y a los servicios de informática del Ayuntamiento, pues descubrieron que los archivos aparecían deteriorados y que el problema se extendía a la información de toda la red informática interna.

Tras los primeros análisis descubrieron que los ordenadores tenían instalado un servidor que no se corresponde con los que pone el Ayuntamiento de Granada. Los técnicos consultaron a la Junta de Andalucía por si esta infraestructura informática hubiera sido configurada por esta institución, en conexión con el resto de los Juzgados. Pero la respuesta fue negativa, de modo que se desconoce el origen de ese servidor infectado, que no corresponde ni al Ayuntamiento ni a la Administración de Justicia autonómica. La consecuencia más inmediata de que ninguna de las partes sea responsable del sistema instalado en esa oficina para compartir archivos es que no hay copias de seguridad, pues no estaba conectado ni a la central municipal ni a la red de la Junta. Los agentes solo cuentan ahora con la información en papel.

Desde el descubrimiento del problema, ha habido reuniones de técnicos y responsables del Ayuntamiento a alto nivel, muy preocupados por las posibles consecuencias del ataque informático. Se han encargado pesquisas e informes de los diferentes departamentos, como Seguridad o Infraestructuras, además de la propia Policía Local.

La investigación abierta trata de determinar varias cuestiones. La primera de ellas es saber quién y cómo se instaló esa red propia que tenía la oficina judicial, que parece no corresponder a ninguna institución oficial y, por tanto, podría carecer de control y seguridad, como lo demuestra el hecho de que no haya copias de los archivos. Al parecer ese servidor podría llevar más de un año instalado y funcionando.

La otra parte de la investigación se centra en el propio virus informático, que actúa sustituyendo o cambiando los archivos que encuentra por otros defectuosos. El Ayuntamiento quiere saber cuando y quién tuvo contacto con el ordenador originario del ataque informático o, incluso, si había algún tipo de acceso remoto. También se están analizando el resto de equipos, el inventario y las diferentes formas de conexión que tenían los agentes asignados a esta oficina.

El mayor problema de esta incidencia es que la información dañada o perdida es muy sensible, pues son diligencias y expedientes relacionados con asuntos judiciales, denuncias e investigaciones en las que trabajaba esta unidad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios