Una empleada de hogar está acusada de robar en la casa para la que trabajaba, después de arrancar presuntamente la caja fuerte de la pared y apropiarse de todo su contenido.

El Ministerio Público pide para la mujer, de iniciales C. L. C. y nacionalidad colombiana, una pena de tres años de cárcel por un delito de robo con fuerza en las cosas.

Los hechos se remontan al pasado mes de noviembre de 2002. Según se extrae del relato suscrito por la Fiscalía, la mujer fue a trabajar como cada día al domicilio, emplazado en la zona de El Candado de la capital.

Ese día entre las 08:30 y las 14:30, "aprovechando la confianza generada al ser la empleada de hogar y estando sola en la vivienda" sustrajo la caja fuerte arrancándola de la pared.

La mujer dio con la caja de seguridad, pese a que estaba oculta detrás de un cuadro de la sala de estar del domicilio. Una vez que la hubo arrancado, la llevó a un sitio adecuado y allí "forzó la cerradura y extrajo su contenido".

De esta forma, la mujer, que se ocultaba tras una identidad falsa, se quedó con numerosos documentos personales, como los pasaportes y un lote de joyas.

Además, la empleada de hogar se apropió de otros objetos que había en la casa, como una cámara de fotos. Todo lo sustraído alcanza un valor total de 72.148 euros, que ahora deberá devolver a los perjudicados, según solicita la Fiscalía, en concepto de indemnización.

No obstante, en este caso, el Ministerio Público cree que esta cantidad debería ser satisfecha por la empresa de limpieza para la que trabajaba la mujer y que fue la que le adjudicó la casa, haciéndose así responsable subsidiariamente de cara a sus clientes.

La Fiscalía pide, de cara al juicio, que se le imponga la pena de tres años de cárcel por el delito de robo con fuerza. Además, le impone el agravante de "obrar con abuso de confianza".