El discurso del Partido Popular ante la construcción del Metro en superficie hasta el entorno del Hospital Civil sigue endureciéndose. Lejos de dejar entreabierta alguna posibilidad de facilitar a la Junta de Andalucía el impulso del proyecto, con el que completar la red del ferrocarril urbano, el presidente provincial de los populares malagueños, Elías Bendodo, coge de nuevo la bandera en contra de esta intervención. "La imposición no la vamos a aceptar", dijo el también presidente de la Diputación en una entrevista a Europa Press, en la que consideró que la Administración regional "ha sobrepasado las líneas" tras declarar de interés metropolitano la extensión del trazado hacia la zona norte, por lo que incidió en que la Junta "tiene que entender que tiene que buscar opciones".

"Que la Junta empiece a estudiar posibles soluciones a este tema; no estamos dispuestos aquí a aceptar imposiciones desde Sevilla", sentenció Bendodo, quien con este mensaje se posiciona del lado del alcalde, Francisco de la Torre, quien hasta la fecha ha mostrado una posición contraria a esta actuación, aduciendo la existencia de un rechazo vecinal amplio.

El dirigente popular recordó la firma del protocolo de intenciones a finales de 2013, en el que se destaca la necesidad de que haya "diálogo previo y consenso vecinal", razón por la cual entendió que "también hay ahí un incumplimiento por parte de la Junta". "Los vecinos de la zona no están de acuerdo con el Metro en superficie; son la mayoría de allí, pero no se manifiestan, evidentemente", expuso. Por ello, insistió en que la Junta "tendrá que buscar la fórmula para establecer un consenso".

En cuanto a los últimos pasos adelante dados por la Consejería de Fomento, entendió que son "preocupantes". "La Junta ha sobrepasado las líneas; no recuerdo en la última década una intromisión tan clara en las competencias de la autonomía como lo que ha hecho el Gobierno andaluz declarando de interés metropolitano del Metro, para, en contra del Ayuntamiento, hacerlo", afirmó. A su juicio, ello supone una "agresión" a la ciudad, al Ayuntamiento, al alcalde, "y a todos los malagueños que están en contra de que el proyecto sea así".

Y recordó su propuesta para disponer el trazado del Metro hacia el norte aprovechando la necesaria actuación urbana sobre el río Guadalmedina. "Es prioritario resolver la solución urbana al río; que, no es meter el metro en el río, sino que primero hay que arreglar el río, embovedar el cauce, si es la solución que se da y arriba hacer un gran bulevar, ya veremos si rodado al tráfico o no, pero, en cualquier caso por ahí si podrá ir un tranvía en superficie", dijo.