No retirar de la vía pública los excrementos de sus perros cuando salen a pasear les ha costado caro a un centenar de malagueños. El Ayuntamiento de Málaga tramitó el año pasado cien denuncias por este motivo, recogido en una ordenanza municipal, y que conlleva multas económicas que pueden llegar hasta los 500 euros.

Un tercio de los expedientes sancionadores que el área de Medio Ambiente inició en 2007 ya se han resuelto y, aunque las sanciones que fija la ordenanza municipal pueden oscilar entre los 75 y los 500 euros, la media a pagar por los dueños de los perros no suele pasar de los 120 euros.

La cuantía que se fija como sanción depende de la zona donde se cometa la infracción y de la reincidencia del propietario de la mascota por no recoger de la calle los excrementos, según explicaron ayer fuentes municipales.

Pero el número de denuncias que el año pasado interpuso la Policía Local de Málaga por este acto incívico, recogido en la Ley de Protección de Animales, es notablemente inferior a las 156 que se contabilizaron en 2006.

El Ayuntamiento de Málaga achaca este descenso al éxito de la campaña de concienciación, que bajo el eslogan de Recógelos, es lo suyo, puso en marcha el pasado mes de septiembre en la ciudad. El objetivo no era otro que implicar a los propietarios de estos animales domésticos en el mantenimiento de la limpieza de la ciudad.