La Demarcación de Costas confiaba en tener margen este año para que acabara la época de temporales antes de empezar la regeneración de las playas de la provincia de cara a la Semana Santa. Pero la meteorología es así de caprichosa y el fuerte viento de levante que sopló la semana pasada durante varios días ha puesto contra las cuerdas a Costas que ha tenido que reprogramar las actuaciones previstas en el litoral y reforzar el número de equipos para que dé tiempo a que el litoral esté a punto para recibir a los turistas en la primera gran cita de la temporada.

Los trabajos para aportar arena en las playas que la habían perdido durante el invierno tuvieron que interrumpirse entre el martes y el jueves por culpa del intenso oleaje. La tregua que el viento ha dado durante el fin de semana permitió que ayer las máquinas volvieran al trabajo y que se retomara el apretado calendario previsto para el viernes.

Pero el jefe de la Demarcación de Costas, Francisco Javier Hermoso, lanzó un mensaje de tranquilidad y aseguró que "dará tiempo a terminar todo, sólo que antes contábamos con cierta holgura y ahora ya no tenemos ese margen".

Hasta ahora sólo se han terminado los aportes en las playas de Rincón de la Victoria, ya que las tareas de regeneración que se estaban realizando en Torrox y en la zona de Benajarafe hubo que interrumpirlas hasta que remitió el temporal.

Ayer las máquinas se desplazaron hasta la zona de Benalmádena y Casares, mientras que hoy se empezará a arreglar las playas de Vélez-Málaga.

La ventaja, según el responsable del organismo dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, es que a pesar de que el viento sopló con fuerza la semana pasada durante varios días seguidos "no provocó más daños de los que ya había" ni se tendrá que actuar en más playas de las diez previstas inicialmente y en las que se echarán unos 50.000 metros cúbicos de arena para reponer las pérdidas del invierno.

Únicamente podría actuarse como añadido en la playa de Guadalmar de la capital, ya que en el resto se mantendrá el plan fijado.

Pero para garantizar los plazos Costas no ha tenido más remedio que incorporar un nuevo equipo que se sumará a los cuatro que ya había contratados. Dos de ellos se mantendrán de guardia durante la Semana Santa en previsión de que el levante siga predominando en los próximos días.