Quince de los 25 detenidos e imputados por la Guardia Civil por su presunta vinculación con una organización delictiva a la que atribuyen más de 300 hechos delictivos cometidos en la Costa del Sol, en su mayoría robos de casa y fraudes con tarjetas bancarias, han ingresado en prisión después de que el sábado fuesen trasladados a Alicante para prestar declaración judicial. La investigación de esta trama continúa y en las próximas horas puede haber novedades en forma de nuevos arrestos.

Según informaron fuentes cercanas al caso, el traslado a tierras alicantinas de los apresados se produjo después de que a lo largo del viernes fuesen puestos a disposición de los juzgados de los partidos judiciales de los municipios en los que fueron arrestados. Las 19 personas que fueron conducidas a Alicante -los seis restantes fueron imputados y quedaron en libertad con cargos- testificaron ante el titular del juzgado de Instrucción número 2 de Torrevieja, que era el que llevaba la causa originariamente y en cuyo favor se inhibieron los magistrados malagueños.

Las citadas fuentes manifestaron que de estas 19 personas, 15 ingresaron en prisión mientras que las otras cuatro, que actuaban como receptadores de los objetos robados, quedaron en libertad con cargos.

Los arrestados están acusados de ser presuntos autores de delitos de asociación ilícita, robos con fuerza, falsificación de documentos, tráfico de drogas y estafas utilizando tarjetas de crédito sustraídas.

La operación Centry se inició a mediados de 2007 después del estudio y análisis de la documentación intervenida en otras operaciones anteriores contra la delincuencia organizada desarrolladas en diferentes provincias. Estas investigaciones permitieron localizar diversos puntos de Málaga donde almacenaban todos los efectos para cometer los robos y los objetos sustraídos.

La Guardia Civil consiguió identificar y detener a los integrantes de la organización delictiva, compuesta por 14 personas de nacionalidad argelina, 6 españoles, 4 marroquíes y 1 francés.

El jefe de la red, fue detenido en Fuengirola después de embestir con su vehículo al coche camuflado de los agentes que intentaban detenerle.

A los detenidos se les imputan cerca de 300 delitos, siendo en su mayoría, robos con fuerza en domicilios y estafas mediante la utilización de tarjetas de crédito sustraídas.