DON Usuario intenta esta semana leer la prensa a través de internet, conectado desde una zona habilitada cualquiera a la wifi municipal, conocida como Red Biznaga. En principio todo debería ser un mero trámite, pero la realidad es mucho más compleja. Una mañana entera fue necesaria para cumplir este objetivo y consultar los titulares de prensa del día por internet.

El dispositivo utilizado fue una videoconsola portátil PSP, el mismo con el que el pasado verano Francisco Salas, concejal de nuevas tecnologías del Ayuntamiento, le mostró al alcalde, Francisco de la Torre, que el invento estaba en marcha durante la presentación de la puesta en marcha del proyecto, realizada en las instalaciones del Centro de Arte Contemporáneo (CAC).

De los 45 espacios municipales que se incluyen hasta el momento en la Red Biznaga, Don Usuario se dirige aleatoriamente a uno de ellos, el Polideportivo La Trinidad, sita en calle Malasaña. En la recepción de la instalación hay visible un cartel que anuncia el espacio wifi. La cosa empieza bien, pero...

-Buenos días, para conectarme a internet, por favor.

-No, no tenemos.

-¿Y ese letrero?

-¡Ah! Eso dejo de funcionar hace meses. Ya no está operativo. Tendremos que quitar el cartel.

La primera en la frente. Estas fueron las palabras del responsable de la recepción del polideportivo en ese momento. No obstante, Don Usuario intenta conectarse y la PSP detecta la Red Biznaga, pero le pide una clave de acceso. Tras informar al empleado municipal, éste le indica, tras algunas consultas telefónicas, que no tienen claves.

Siguiente parada, el Teatro Cervantes. A simple vista, no hay cartel que anuncie zona wifi. En la taquilla nadie sabe nada y en información tampoco. "Dicen que lo van a poner, pero ahora no tenemos", explican. En este punto, el dispositivo no detecta ninguna conexión a internet. Muy amables los trabajadores del Cervantes, remiten a Don Usuario al distrito Centro, junto al mercado municipal de La Merced.

Y más de lo mismo. En estas dependencias sí hay conexión, pero nadie ofrece una contraseña con la que poder conectarse. "Debes de solicitarla en la Fundación Picasso para poder entrar", dicen en la oficina de atención al ciudadano, con sede en la propia oficina de la junta de distrito Centro. Ésta es otra de las sedes municipales conectadas a la Red Biznaga, pero en teoría en cada punto debe facilitar información y ayuda sobre el servicio. Pero Don Usuario acude a la Casa Natal de Picasso y al fin le dan una contraseña. Sin embargo la conexión es muy floja, en torno al 30%, y no puede acceder a internet.

Desesperado, decide acudir al CAC, donde se presentó la Red Biznaga meses atrás. Allí ofrecen la contraseña, pero siquiera es necesario, pues antes de tramitar este asunto, la PSP accede a internet sin necesidad de clave alguna y lee los ansiados titulares de prensa. ¿Prueba superada?