MUCHO se encargó el PP de cuidar al líder de la oposición del Ayuntamiento de Málaga, Rafael Fuentes, cuando éste se vio salpicado por la polémica del abultado sueldo y el plus de productividad en su etapa al frente de la Sociedad de Planificación y Desarrollo (Sopde), dependiente de la Diputación de Málaga. Entonces, incluso el partido dejó en mal lugar a su grupo en la institución provincial, que denunció los hechos, al intentar que se hiciera la menor sangre posible.

La razón para actuar así con el contrario no tenía nada que ver con la lealtad o el hoy por ti y mañana por mí, sino con el más puro egoísmo. Los populares estaban encantados con la labor de oposición de Fuentes y tenían miedo de que si la prensa lo zarandeaba demasiado el afectado arrojara la toalla, o el PSOE forzara un nuevo recambio.

Los ideólogos de aquella estrategia no deben de estar ahora tan contentos con la decisión. Fuentes se ha cobrado su pequeña venganza y ha demostrado que no se debe menospreciar al rival. Si entre los múltiples cargos de confianza del Ayuntamiento figurase algún entrenador de fútbol, tal vez algo tendrían la lección aprendida.

De mal en peor

El caso es que el alcalde lleva un par de meses de arranque de año bastante nefastos. Entre el trucaje de fotos, la irrupción de su mujer como nueva portavoz del equipo de gobierno, los Presupuestos de crisis con marcha atrás, tras la retirada de 30.000 euros de subvención concedidos a la cofradía de la Sangre, con lo delicado que es en Málaga todo lo concerniente a la Semana Santa... y ahora los cargos de confianza blindados y con sueldos estratosféricos. Mejor esta noche a las 00:00 tomarse otra vez las uvas y empezar de nuevo.

Por cierto, hay que tener cuidado con el populismo y la demagogia. Las rectificaciones son de sabios si no las fuerzan los listos. Puestos a seguir con el espita abierta por el alcalde, ¿por qué el Ayuntamiento cede gratis los suelos a las hermandades con la cantidad de personas sin recursos que carecen de viviendas? ¿O es que ayudar a pagar un palio está mal pero subvencionar una casa hermandad es potenciar las infraestructuras de la capital? Y siempre quedará la duda de qué hubiera pasado si en lugar de La Sangre, la cofradía hubiese sido El Cautivo o La Esperanza. ¿Se habría atrevido a hacerle el feo con los miles de hermanos que tienen y la infinidad de devotos que arrastran? No se puede gobernar con la urna en la cabeza porque al final se pierden las papeletas.

El subdelegado

Actividad frenética para su costumbre la que desarrolla el subdelegado del Gobierno, Hilario López Luna. Después de vivir oculto una legislatura, ahora está como loco por salir en la prensa y se muestra dispuesto a realizar declaraciones sobre los sucesos que ocurren, aunque dicho sea de paso, en general, sus manifestaciones se limitan a contar lugares comunes y frases hechas tales como que la Policía siempre avanza en sus investigaciones, que mejora lo del chiste del cigarrillo. El toque de atención del secretario general del PSOE, Miguel Ángel Heredia, ha obrado el pequeño milagro. Aunque si Zapatero tiene que encomendarse a López Luna para defender su gestión en Málaga, mejor que se lo encargue a los obispos. Pero hace bien López Luna en dejarse ver. Su cargo es muy apetecible y no le faltan candidatos, algunos andan entretenidos con la circulación, pero otros están ociosos y no saben cómo darse paseos hasta Madrid, para recordar que en caso de necesidad tienen el nivel 30.