El secretario general de Empleo del Ministerio de Trabajo, Antonio González, destacó ayer la situación del mercado laboral en Málaga. De hecho, cree que el único problema que puede tener la provincia, la ralentización del sector de la construcción, no supondrá un trauma para el empleo. Al contrario, la situación volverá a la normalidad.

González explicó que "el fuerte tirón de la construcción" en los últimos años hizo que se produjera un "trasvase" desde las actividades tradicionales como las reparaciones domésticas hacia las grandes obras. "Pero ahora, se está produciendo el camino de vuelta", lo que ya ha motivado un aumento de afiliados al régimen de autónomos, ha indicado González. Como ejemplo del cambio estructural que se está produciendo ha citado, precisamente, el caso de Málaga, donde actualmente hay menos empleados en la construcción que al principio de la legislatura, mientras que el empleo ha crecido más en el sector servicios y la industria.

Según apuntó el responsable gubernamental, el empleo de Málaga ha crecido en 163.000 puestos de trabajo en los últimos cuatro años, lo que supone un crecimiento "espectacular" del 39 por ciento y el 25 por ciento de los empleos creados en Andalucía. Además, de los 390.000 contratos fijos (tanto nuevos como conversiones de temporales) desde la reforma laboral (hace 18 meses), 94.000 son de Málaga y la mitad de ellos a mujeres y jóvenes de menos de 30 años.

González participó ayer en el foro de debate sobre políticas de empleo organizado por la asociación Madeca y la Sopde, empresa pública dependiente de la Diputación.