El programa de trasplantes en Málaga sigue dando satisfacciones a los profesionales y soluciones a los enfermos. El año pasado se hicieron 178 de estas operaciones, lo supone más trasplantes con menos donantes. En 2010, se registraron 172 intervenciones y 82 donaciones. En 2011, los trasplantes aumentaron a 178 pese a que hubo 79 donantes. "El balance es óptimo. Hemos conseguido aumentar los trasplantes con respecto a 2010, que ya fue récord, pese a tener tres donantes menos. Por cada donante, se ha aumentado el número de órganos viables para trasplantar. Hemos optimizado la donación", apuntaba el coordinador del sector Málaga, Miguel Ángel Frutos. El mérito es de ocho hospitales públicos de Málaga, Almería, Ceuta y Melilla -donde se hacen las donaciones- y del Carlos Haya -donde se realizan las intervenciones-. Pero fundamentalmente es un logro terapéutico que es posible gracias a los donantes que dan sus órganos.

La generosidad del sector Málaga es de las más altas del mundo. La tasa de donantes por millón de habitantes es de 32,6 donantes por millón de habitantes, frente a la andaluza que se sitúa en 36,6 y a la española, de 33,9. El dato supone que la donación en el sector Málaga es más alta que en España y en Andalucía. En esa línea, la negativa a la donación en la comunidad es del 17%, mientras que en Málaga es del 14%. Este último porcentaje es incluso más bajo que el del año 2010, cuando se situó en el 15,4%. El año pasado se hicieron 115 trasplantes de riñón en el Carlos Haya -los mismos que en 2010-, 51 de hígado -ocho más que en el ejercicio anterior- y 12 de páncreas -dos menos que en el balance precedente-. Con estas cifras, el hospital malagueño se sitúa en segundo lugar en trasplantes de Andalucía, después del Reina Sofía, de Córdoba, que hizo 192 de estas operaciones y por delante de Virgen del Rocío, de Sevilla (164), el Virgen de las Nieves, de Granada (117), y el Puerta del Mar, de Cádiz (71). Pese a esta intensa actividad, todavía hay 274 pacientes en lista de espera aguardando un órgano. Un total de 232 enfermos esperan un riñón, 35 un hígado y 7 páncreas. La única razón es que a pesar de que la tasa de donación es de las más altas del mundo, aún así hacen falta más donantes. Y aunque se realiza un trasplante cada dos días en el hospital malagueño, permanentemente entran nuevos enfermos en las listas de espera. Pacientes que salvan la vida gracias a que hay personas que dicen sí a la donación.