Más de 5,5 toneladas de hachís han sido intervenidas por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en dos operaciones desarrolladas en la provincia de Málaga, que se han saldado con un total de diez detenidos. En una de las operaciones, la Guardia Civil desmanteló una red de narcotraficantes en una operación que se ha saldado con una decena de arrestados -cuatro búlgaros y seis españoles- y la intervención de más de cuatro toneladas de hachís en un velero que habían trasladado hasta el puerto de Santa Pola en Alicante. La operación, denominada Gabela, se ha desarrollado en las provincias de Málaga, Alicante, Jaén y Murcia y ha permitido la incautación de 170 fardos de hachís, además de 70.000 euros, una pistola, un revólver, un velero y seis vehículos. En los días previos a las detenciones, los agentes habían detectado cómo algunos de los arrestados, que residían en Marbella, se desplazaban a Alicante para reunirse con otros integrantes del grupo en hoteles de lujo y centros comerciales. A los detenidos se les acusa de delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, asociación ilícita, falsificación de documentos y blanqueo de dinero.

Por su parte, la Policía Local de Vélez- Málaga y el Cuerpo Nacional de Policía intervinieron 1.560 kilogramos de hachís que varias personas estaban desembarcando en una playa de Torre del Mar. Un testigo alertó a los agentes de que dos personas acarreaban bultos hasta un vehículo además de que otros dos individuos, uno en la playa y otro en una embarcación, se comunicaban vía móvil. En la operación no se produjeron detenciones, ya que los individuos se dieron a la fuga.