El compromiso de la Consejería de Salud de hacer un nuevo Regional con 800 camas en la capital es la tercera promesa que hace en una década. Las dos primeras no las cumplió. La última está por verse. El 5 de diciembre de 2007, la entonces consejera María Jesús Montero anunció que el tercer hospital de la ciudad de Málaga sería en los aparcamientos del Civil, tendrá 110 habitaciones y costaría 50 millones de euros.

Como el proyecto no salía adelante, sindicatos y organizaciones sociales empezaron a organizar una gran movilización. Una semana antes de la manifestación, Montero volvió a la ciudad y -sin tener suelo ni financiación- prometió un macrohospital de 1.500 camas y una inversión de 600 millones. Al final, la Consejería no hizo ni el proyecto más modesto, ni el más ambicioso. Incumplió los dos. El lunes pasado, por tercera vez, Salud anunció un hospital para la ciudad; de 800 camas y 230 millones de coste. Esta vez el proyecto ha sido fruto del trabajo de más de 300 profesionales de la sanidad durante casi un año y llega tras una espera de los malagueños.