Febrero de 2020. Esta es la previsión temporal que maneja la Junta de Andalucía para que los trenes del Metro de Málaga puedan llegar hasta la estación Atarazanas, localizada en el lateral norte de la Alameda Principal. El dato supone una precisión respecto al último calendario anunciado por el consejero de Fomento, Felipe López, quien en su última visita a la capital de la Costa del Sol aplazó este hito a dentro de tres años, pero sin mayor concreción.

Eso sí, los viajeros se toparán con la imposibilidad de bajarse en la estación Guadalmedina, localizada en las proximidades de El Corte Inglés, cuya obra se prolongará durante algunos meses más. Para evitar un alargamiento en los plazos de llegada a la Alameda, la Agencia de Obra Pública de Andalucía apuesta por "una solución pasante", sin que los trenes paren en esa parada.

De cumplirse el tiempo apuntado, el acercamiento definitivo del suburbano al casco histórico tendrá lugar once años después de que los entonces responsables de la Administración regional marcase el mes de febrero de 2009 como el momento en que estarían culminadas y en servicio las líneas 1 y 2 del ferrocarril urbano. Un trazado que, en origen, se extendía hasta la plaza de toros de La Malagueta.

El interrogante es si en este escenario temporal podrá o no incluirse el tramo en superficie hasta el entorno del Hospital Civil, intervención avalada por los acuerdos adoptados a finales de 2013 por el Ayuntamiento y la Junta, pero que cuenta con el rechazo del alcalde, Francisco de la Torre. Si bien la Administración regional viene anunciando desde hace meses su intención de licitar en octubre las obras de ejecución del tranvía a la zona norte, el propio consejero reconoce en una nota informativa en que la culminación de esta pieza del Metro "dependerá de la colaboración que ofrezca el Ayuntamiento ante la necesidad de coordinar la reordenación del tráfico y los servicios afectados".

Es decir, que de no producirse tal cooperación, como ha señalado en otras ocasiones, se antoja imposible el arranque y desarrollo de los trabajos. A pesar de ello, desde la Junta apuntaron que en el caso de que la colaboración municipal "sea absoluta", la puesta en servicio del ramal a ras de calle se situaría en los primeros meses de 2020.

Precisamente ayer, el consejero respondió en el Parlamento andaluz a una pregunta oral realizada por el parlamentario del PP Félix Romero, en la que éste le exigió detalles sobre la culminación de la red del suburbano y le criticaba el retraso en las obras y el incremento de los costes. Incluso, recordando un informe de la Cámara de Cuentas aludió a una variación de unos 1.000 millones de euros en el coste final del proyecto. Ante el mensaje del popular, López le reclamó que solicite al alcalde de Málaga que preste su colaboración a la terminación el proyecto ferroviario. "Que el Ayuntamiento no ponga más palos en las ruedas y que facilite la culminación de la red", reclamó, al tiempo que criticó la actitud de Francisco de la Torre en este asunto, calificando de "sibilina" su actitud.