El presidente del PSOE malagueño y presidente de la gestora que dirige la formación socialista en el municipio de Estepona, Juan Paniagua, defendió ayer la destitución de los cuatro ediles socialistas imputados en la operación contra la corrupción en el municipio. A su juicio, se trata de una acción "lógica" y "política", toda vez que estos concejales ya habían dejado de ser miembros del PSOE. "Hemos pedido su destitución porque no han querido entregar sus actas y por ello dejan de ser militantes socialistas", comentó, al tiempo que subrayó la apuesta de su partido por mantener el pacto de gobierno con PA, IU y Estepona 2007, similar al que había antes de que fuesen detenidos cinco concejales socialistas, incluido el ex alcalde Antonio Barrientos.

De acuerdo con los plazos, lo previsto es que el próximo viernes tenga lugar la sesión plenaria en la que se dará a conocer la renuncia de Barrientos como alcalde y edil, momento en que también será nombrado su sustituto como miembro de la Corporación. Para el nombramiento del próximo regidor habrá que esperar algo más, previsiblemente hasta el próximo 17 de julio. La intención del PSOE pasa por presentar un candidato que no esté implicado en el actual proceso judicial. De acuerdo con el orden de la lista con la que los socialistas acudieron a las elecciones municipales de mayo de 2007, los primeros ediles no afectados por esta operación son el de Urbanismo, Rafael Duarte, que fue número 3 en la lista a los comicios, seguido de David Valadez, número 6. Se da la circunstancia de que este último denunció las presuntas anomalías que se producían en el Consistorio ante la Ejecutiva provincial del PSOE.