La Confederación Española de Policía (CEP), a través de sus comités regionales de Andalucía Oriental y Occidental, celebró ayer un acto simbólico en el puerto, en el que se repartieron 1.000 pasquines informativos -en árabe y en castellano- a los ciudadanos marroquíes que accedieron al ferry que cubre la ruta hasta Melilla, para explicar que en España las mujeres, también las policías, gozan de los mismos derechos y libertades que los hombres, con motivo del conflicto registrado a raíz de los carteles colgados en la frontera de Beni Enzar, de Marruecos con Melilla , denigrando la imagen de la mujer policía.

El reparto que, según la CEP se realizó sin ningún incidente, tuvo lugar a lo largo de la mañana, en los ferrys de las 8:00 y de las 13:00, donde los miembros del sindicato de Policía, además, recogieron la opinión de varias personas. Los pasquines, traducidos voluntariamente por una chica magrebí, en general, se acogieron con curiosidad y fueron muchos los que preguntaron el significado de las octavillas e, incluso, según el secretario regional de la CEP para Andalucía Oriental, Juan Carlos Gil, obtuvieron "la enhorabuena de un matrimonio marroquí", que recibieron "con mucha alegría". Por otra parte, según Gil, las personas que no se mostraron de acuerdo se limitaron "a cogerlas con rostro serio".

El secretario regional, por otra parte, explicó que lo que hicieron ayer "no es más que reivindicar los derechos de igualdad", por lo que, aseguró, no quieren "el enfrentamiento ni la guerra con ningún país vecino". Las movilizaciones continuarán en los próximos días en los puertos de Algeciras y Almería, aunque el secretario general de la CEP en Andalucía Occidental, Fernando Ramón Calderón, aseguró que "detendrían las movilizaciones siempre que desde el Gobierno defiendan la postura de la mujer en su puesto de trabajo y la labor policial".

Desde la CEP se mostraron muy "decepcionados" con el papel que ha jugado el Gobierno en el ataque contra las agentes en Marruecos y tacharon de "frívola" a la campaña en la que se pedía abrazos para las policías. Del mismo modo, Calderón se mostró "seguro" de que "esas 15 féminas no quieren que se les den medallas cuando al varón que tienen al lado no se les galardona por el mismo trabajo" y confesó que "cuando se monta en un vehículo patrulla, no se cuestiona si el compañero que tiene al lado es una mujer, y sólo piensa que es la otra mitad que le puede salvar la vida".

Los sindicatos consideraron "una ofensa que se desprestigie a la mujer en su puesto de trabajo, en un país donde actualmente trabajan alrededor de 100.000 mujeres policías, después de 30 años luchando por que estas féminas tuvieran igualdad dentro del Cuerpo Policial" y reprocharon al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, el "haber evitado un apoyo inequívoco a la Policía en Melilla, frente a quien ha criticado su trabajo, para abrazar los principios de la conveniencia política ".

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