Dos días después del pleno de investidura en la Diputación de Málaga, en el que se hizo una llamada al diálogo y al consenso, y antes de que hayan siquiera comenzado las sesiones ordinarias, los grupos políticos en la institución provincial protagonizaron el primer encontronazo del "nuevo tiempo" iniciado. Fue ayer durante el pleno extraordinario de organización, a cuenta, entre otras cosas, de la creación de una comisión especial de transparencia, propuesta planteada por el PSOE y rechazada de pleno por el PP y Ciudadanos.

El portavoz socialista, Francisco Conejo, presentó una moción en la que se pedía la constitución de una comisión, inspirada en la que se ha creado en el Ayuntamiento de la capital, en la que de manera independiente se traten los asuntos relacionados con la transparencia y que, además, estuviera presidida por todos los grupos de manera rotativa cada seis meses.

Ante la negativa del equipo de gobierno del PP y de sus socios de Ciudadanos, Conejo manifestó sentirse "entristecido" por "el primer desencuentro" entre su grupo y el dirigido por Bendodo, a quien dijo que no había entendido "el espíritu de este nuevo tiempo donde no hay mayorías absolutas", expresando la "actitud de cogobierno" con la que los socialistas pretenden conducirse esta legislatura.

Finalmente, las comisiones serán dos: la de Desarrollo Económico y Productivo, y la de Servicios a la Ciudadanía. En esta última, a propuesta de Ciudadanos, se incluirá un punto fijo sobre transparencia. El portavoz del partido naranja, Gonzalo Sichar, recordó que la transparencia era "uno de los ejes" de la Vicepresidencia de Servicios a la Ciudadanía, por lo que consideró "suficiente" un punto fijo dentro de una de las comisiones para tratar estos asuntos. Además, indicó que son "los primeros interesados en que la transparencia gane" en la Diputación y que, aunque la presidencia no sea rotativa, "la información la vamos a tener".

También causó controversia la aprobación de las asignaciones mensuales, que quedaron fijadas en 7.300 euros por grupo y 500 euros por cada diputado, por lo que no salió adelante la propuesta de la portavoz de Málaga Ahora, Rosa Galindo, que pidió que la asignación por grupo se bajara a los 5.800 euros. En cuanto a los cargos eventuales, se han reducido a 26 (ocupados por 28 personas, ya que hay dos desdoblados). De ellos, diez lo integran el personal eventual que trabaja para los grupos políticos, y el resto se distribuye entre seis directores de área, siete directores técnicos, dos secretarias de dirección y un jefe de gabinete.