Málaga

Tomás de Cózar se vacía

  • Promotores afincados en la vía ponen en venta sus solares ante las dificultades para intervenir

Tomás de Cózar, parte de la antigua judería, es reflejo del desapego sufrido durante décadas por el casco antiguo. Lejos del auge empresarial de años pretéritos, esta vía sigue hoy plagada por edificios en ruina y solares vacíos. Es la imagen del otro centro, de ese que sólo pisan los turistas despistados y extraviados. La esperanza de algunos por que la iniciativa privada fuese suficiente para lavar la cara a este espacio se desvanece, más aún cuando algunos de los que apostaron por actuar en esta estrecha calle abandonan.

Son varios los carteles de Se vende que se pueden observar en un simple paseo por la calle, constancia de la huida de algunos propietarios ante la imposibilidad de intervenir. Un ejemplo es el de la empresa Aire, firma que había proyectado años atrás la construcción de unos baños árabes y apartamentos en una de las parcelas. Sin embargo, los responsables de la promotora dicen haberse visto obligados a poner el cartel de venta. "Es imposible actuar aquí, no ha habido ayuda por parte de nadie", atestigua Armando Prados, representante de Aire, quien precisa que la iniciativa se la lleva a Palma de Mallorca.

"Mira que hemos estado en ciudades, pero en Málaga no nos queda más que rendirnos", añade. Prados informa de que llevada casi cuatro años tramitando la actuación, que iba a suponer una inversión próxima a los 7 millones, mediante la construcción de unos baños árabes y una veintena de apartamentos. "No pudimos impulsar la actuación después de dos años, ha venido la crisis y tampoco hemos encontrado agilidad administrativa", precisa. Ahora, ponen precio a la parcela de 500 metros sobre la que dibujaron su promoción: 2,6 millones de euros.

A apenas unos metros se levanta un destartalado inmueble sobre el que pende otro cartel de venta y un número de teléfono de contacto. Al otro lado de la línea telefónica, un empresario catalán que prefiere mantenerse en el anonimato. "Compré el edificio en 2005 con el pensamiento de remodelarlo y tirar adelante. Uno intenta invertir en una ciudad que no es la suya y la cosa no funciona como debería. El problema es la falta de colaboración de las administraciones", sentencia, al tiempo que añade: "Para que esta zona forme parte de la ciudad con mayúsculas a lo mejor tendría que haber más flexibilidad por parte del Ayuntamiento a la hora de permitir la rehabilitación".

La intención de este promotor era la de construir apartamentos en un inmueble de 175 metros cuadrados de techo. "Pedí que para que el negocio saliese rentable me dejasen levantar una planta más, pero Urbanismo dijo no, que la fachada está protegida y no se podía tocar. Hubo una ilusión pero al final uno se da de bruces con la realidad", confiesa.

Frente a lo expuesto por estos propietarios, desde el Ayuntamiento se asegura que no existe tal entorpecimiento. "Por nuestra parte siempre prestamos la máxima colaboración con los empresarios, porque lo que queremos es que se abran locales y se creen negocios", manifiesta el concejal de Urbanismo, Manuel Díaz Guirado. El edil del PP destaca que al objeto de mejorar el entorno, el Consistorio acaba de iniciar los trabajos de reurbanización de Tomás de Cózar y Beatas, medida que los vecinos de la zona valoran.

No obstante, consideran inadecuado que se apueste por cambiar el pavimento antes de dar solución a los inmuebles y solares. "Si esperamos a que los edificios estén recuperados probablemente tardemos años en arreglar la calle. No podía espera más. El arreglo puede ser un elemento dinamizador", aclara Díaz Guirado.

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