El futuro uso de, probablemente, el mejor solar del Centro histórico de Málaga, hoy ocupado por los ruinosos antiguos cines Astoria y Victoria, sigue pendiente de definición. Tras varias rondas de contactos con los equipos que participaron en el concurso de ideas mejor valorados por el jurado (a excepción del de Antonio Banderas, ganador del mismo pero que se autoexcluyó), los responsables deL Ayuntamiento, lejos de cerrar el círculo, quieren mantenerlo abierto con el fin de ampliar en lo posible el número de pretendientes.

De las reuniones con los secundarios del Astoria (se llegó hasta el décimo en puntuación) se concluyó la existencia de al menos tres con promotores dispuestos a ir adelante con la millonaria inversión que supondrá transformar la herida que hoy supone este inmueble. Y si bien las impresiones extraídas de los encuentros con los equipos de arquitectura y con las empresas vinculadas a los mismos fueron favorables, los responsables municipales no parecen del todo convencidos. Tanto es así que en lugar de fijar el camino directo hacia la convocatoria del concurso mediante el que adjudicar la concesión demanial sobre este suelo, adquirido a finales de 2010 por el Ayuntamiento por un valor cercano a los 21 millones de euros, quieren seguir explorando otras posibilidades.

El Ayuntamiento pretende que haya "la máxima concurrencia" para dar la concesión

"Vamos a ampliar los contactos para ver si hay más equipos que tienen promotores interesados; el objetivo es conocer otros proyectos porque lo que queremos ante todo es la máxima seguridad y que haya suficiente concurrencia", explicaba una fuente municipal, que incidió en que si bien las propuestas ya conocidas "están bien, alguna de ellas está madura, quizás tres son pocas para decidir el futuro de esta gran manzana".

En este nuevo escenario, lo que va a hacer Urbanismo es llamar a aquellos equipos que dentro de las memorias de sus propuestas precisaron la existencia de grupos empresariales dispuestos a transformar en realidad la idea presentada. De acuerdo con lo apuntado por varias fuentes, hay varios casos en los que tal apunte se realizó, si bien la inmensa mayoría de los casos obvió referencia alguna a promotores potenciales por no tratarse de una exigencia del concurso. Y a eso añadieron: "hemos preguntado a algunos estudios si tenían o no refrendo de alguna empresa".

A expensas de lo que suceda con este nuevo movimiento, el Ayuntamiento sí cuenta al menos con el comodín de saber que de entre los diez proyectos mejor valorados, quitando el de Banderas, tres estaban en condiciones de ir adelante con la iniciativa. El cuarto que mejor nota recibió del jurado, MAV, está respaldado por Enjoy Wellnes, que cuenta con el apoyo del fondo de inversión Espiga. Su iniciativa pasa por trasladar a la manzana de los antiguos cines un modelo innovador en materia deportiva y de salud, que aunase espacio para el ocio y la salud.

Enjoy Wellnes, como refleja en su web, apuesta por "ofrecer un servicio diferenciado y de calidad adaptado a las circunstancias reales de cada persona, momento y lugar; llegar al 100% de la población, popularizando el concepto wellness en todos sus aspectos". Y ello, en el caso del Astoria, pasa por incluir "balneario, piscina, tratamientos terapéuticos, zona de ludoteca, cafetería de la salud en la que se aprende a comer y a preparar los productos, espacios de chill out en la cubierta, zona fitness", relataron fuentes próximas al proyecto. Además, el edificio futuro albergaría un auditorio capaz de albergar a unas 600 personas (1.500 metros de superficie). Todo ello con una inversión estimada de 7 millones de euros.

Una cifra muy lejana a los cerca de 21 millones de la propuesta del mercado gastronómico y cultural impulsada por Mercado Victoria, que a los espacios de restauración añade un teatro subterráneo para 1.200 personas. La planta baja estaría reservada para un mercado gastronómico que contaría con los hosteleros de la ciudad. La primera planta se destinaría a la Casa Natal Pablo Ruiz Picasso; la segunda, a una sala de congresos, espacios para showcooking. Y la última planta cubierta está pensada como mirador, con huertos para presentaciones.

El tercer equipo que puede contar con promotor es el que formuló la propuesta CAVE-A,que da forma a una "casa de música", con un coste estimado de 8,5 millones de euros. Dentro de sus usos se otorga especial protagonismo al espacio de representación sinfónica, incluyendo además salas de ensayo y eventos musicales, aularios de formación, y usos lucrativos como cafetería a ras de la Plaza de la Merced, restaurante en el nivel superior de edifico y tiendas de venta de productos musicales. En la planta baja ser articula la reserva expositiva para la Casa Natal Pablo Ruiz Picasso.