educación Este curso estudian Bachillerato en Málaga 21.661 estudiantes y Educación Secundaria más de 65.000

Más de 100.000 alumnos se verán afectados por la reforma educativa

  • La mayoría de los sindicatos ve positivo que el Bachillerato se alargue a tres años pero no todos coinciden en el beneficio de acortar la Secundaria · El cambio obligará a los escolares a elegir antes su camino formativo

Un total de 21.661 alumnos estudian Bachillerato en los institutos malagueños. Más de 65.000 cursan alguno de los cuatro años de la Educación Secundaria Obligatoria y 15.000 han optado por la Formación Profesional. En total, algo más de 102.000 alumnos en la provincia se encuentran inmersos en las etapas educativas que prevé reformar el Gobierno. El ministro de Educación anunció el pasado martes que se recortará la Secundaria en un año, desaparecerá 4º de ESO, pero será obligatorio un primer curso de FP o de Bachillerato. Unos con recelo y otros con mayor aceptación, los sindicatos piden, ante todo, que acaben los "vaivenes políticos" para dar coherencia al sistema.

En Comisiones Obreras mostraban ayer su "total discrepancia" con las manifestaciones de José Ignacio Wert. "Plantear todo esto en una comparecencia ante la Comisión de Educación del Congreso sin haber reunido a los agentes sociales, promover una reforma sin apoyo de los profesionales educación significa no ir por buen camino", comentó ayer José Fernández, secretario provincial de Enseñanza de CCOO, que no considera adecuado que los alumnos tengan que elegir un año antes su itinerario formativo, decidir si siguen hacia el Bachillerato y la Universidad o hacia la FP. "No vemos que vaya a mejorar la cosa, no garantizan la igualdad entre el alumnado, sino que vamos hacia atrás", consideró Fernández.

Por su parte, UGT manifestó su apoyo el aumento a tres años del Bachillerato a pesar de que "un curso más no soluciona el problema del fracaso escolar, sino un aumento de plantilla, la incorporación nuevos perfiles profesionales, la verdadera atención a la diversidad, la bajada de ratio", explicó Teresa Blanca, secretaria de la Federación de Enseñanza en UGT Málaga. Añadió la responsable en materia educativa del sindicato que existen "otras prioridades" y "lo que no podemos renunciar es a la universalidad de la educación, que ha de ser correctora de desigualdades". También manifestó que considera "prematuro" que un alumno de 15 años se decida ya por uno u otro camino formativo.

Pero no tienen igual opinión los portavoces de sindicatos como CSI-CSIF y APIA. Ramoni Ruiz, de CSI-CSIF, aseguró ayer que "hay muchos estudiantes que no muestran ningún interés en tener el mismo curriculum que los que están orientados a la universidad" y añadió que sería más útil iniciar antes el aprendizaje de un oficio, lo que podría acabar con la "frustración" de alumnos y docentes. En cuanto a la Formación Profesional, Ramoni Ruiz consideró que "las pretensiones de iniciarlo un año antes y concertar las prácticas con empresas desde el principio, como el modelo alemán, nos parece muy bien", aunque se sea consciente de la diferente realidad empresarial de ambos países y de la incertidumbre de poder hacer realidad este propósito.

Para la Asociación de Profesores de Instituto de Andalucía "adelantar en un año la toma de decisión nos parece acertado, incluso insuficiente, ya que los itinerarios deberían comenzar antes, como en Alemania que se inician a los 12 años", comentó Gonzalo Guijarro, que concibió como positivas las medidas del gobierno aunque las tildó de "excesivamente tímidas".

Al margen de las dudas que nacen de estos anuncios, lo que sí quieren dejar claro los responsables sindicales es que no son buenas las eternas modificaciones cada vez que se produce un giro en el gobierno. "Llevamos 40 años de cambio, esto demencial, necesitamos un gran pacto por la educación, que le de coherencia a todo el sistema, que no estemos al vaivén del partido político que gobierne en el momento", dijo ayer Teresa Blanca. "Es cierto que el sistema no funciona, que hay que cambiarlo, pero a ver si podemos hacer una reforma con un consenso y que eso conlleve una estabilidad completa", comentaron desde CSI-CSIF.

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