La barriada de Ciudad Jardín se levantó sobre los terrenos ganados al cauce del río Guadalmedina después de su encauzamiento. Fue en esta zona donde se materializó en los años 20 la mayor expresión del cambio en la política de vivienda que empezó a fraguarse a principios de ese siglo para tratar de acabar con el problema de la vivienda en Málaga, aplicando las sucesivas legislaciones de las llamadas casas baratas.

Las inundaciones de 1907 habían obligado a las administraciones a plantear soluciones a los problemas derivados de las periódicas avenidas del Guadalmedina. Para ello la División Hidrológica del Sur de España trazó un plan que incluía la canalización del río, construcción de una presa de retención a la altura de El Agujero y repoblación forestal de la cuenca alta del río. La ejecución de la canalización del río permitió la liberación de una extensa franja de terreno que había pertenecido a su cauce y que ocupaba una superficie de 57 hectáreas.

Tras su cesión al Ayuntamiento en 1915, el historiador Víctor Heredia explicó que se elaboraron varios proyectos de urbanización e incluso una propuesta para construir 500 casas baratas de iniciativa municipal. Sin embargo, fue finalmente el arquitecto Gonzalo Iglesias el que consiguió que el municipio le cediera los terrenos para promover un nuevo barrio que aunaba los modelos de ciudad jardín y ciudad lineal. El propio Iglesias se encargó de realizar el proyecto definitivo, modificando el que había preparado el arquitecto municipal Daniel Rubio.

La Ciudad Jardín se planteaba como la mayor empresa inmobiliaria de la historia de la ciudad y se plasmó en un paseo de más de dos kilómetros de longitud y de 45 metros de anchura, que articulaba linealmente hasta 1.049 viviendas construidas en diferentes fases (al final se hicieron la mitad) y según diversas tipologías.

Predominaban las casas unifamiliares con jardín de diversos tamaños, aunque también se incorporaban algunos edificios plurifamiliares, las llamadas colectivas. "La nueva barriada surgía como un espacio de calidad ambiental, dotada de amplios espacios abiertos privados y públicos, y con una serie de equipamientos deportivos y culturales que luego no se completaron", aseguró Heredia. Se trataba, en definitiva, de un nuevo tipo de viviendas destinadas a las emergentes clases medias y a los militares licenciados de la guerra de Marruecos.

La primera casa del barrio

La casa de la imagen puede que se trate de la primera de la nueva barriada que se entregó en 1926 a la viuda y a la hija del teniente Justo Sierra, que murió en el episodio de Igueriben, junto con el comandante Benítez, en los acontecimientos militares del desastre de Annual de 1921. Esta casa fue donada por la empresa constructora de la barriada, y el alcalde decidió que fuera entregada a la viuda de este militar.

Primeros autobuses urbanos

Los primeros autobuses urbanos de la capital entraron en servicio hacia 1926, con la puesta en marcha de las líneas de la Colonia de Santa Inés, una de las barriadas más alejadas del centro, y de Ciudad Jardín, que comunicaba el centro con el nuevo barrio construido en los años anteriores a cargo de concesionarios particulares.