Málaga

Por el camino que lleva a los belenes

  • Museos, instituciones y cofradías lucen nacimientos por toda la ciudad · Un paseo por el centro y los barrios ofrece numerosas posibilidades para poder admirarlos

Un río atraviesa una pequeña ciudad en la que comerciantes se entremezclan con pastores, mientras que la autoridad imperial otea desde el horizonte cómo los reyes venidos de tierras lejanas adoran al que un ángel anuncia como Mesías. Todo esto representado con el encanto de las miniaturas y lo certero de los detalles hacen del montaje los nacimientos una de las tradiciones más arraigadas en las fiesta de la Navidad. Al llegar estas fechas al calendario, la ciudad ofrece un amplio abanico para poder contemplar la ciudad de Belén ideada y recreada en apenas unos metros cuadrados.

Características son las largas colas que cada año se congregan a las puertas del Ayuntamiento para poder contemplar en primera fila la pequeña gran ciudad que cada Navidad ocupa el Patio de Banderas de la Casona del Parque. Un total de 150 metros cuadrados en los que las escenas bíblicas se mezclan con elementos de clara tradición malagueña a los que dan vida las casi trescientas figuras que componen el nacimiento. El belén municipal podrá ser visitado en horario de 10:00 a 14:30 y de 16:00 a 21:00.

Las instituciones de la ciudad que realizan labores asistenciales a los más necesitados no pasan de largo las tradiciones navideñas. En plena calle Mártires se alza el centro de acogida de San Juan de Dios, cuyo patio andaluz acoge desde hace décadas su belén. El padre Prieto es el artífice de este montaje que realiza cada año con los internos que allí residen. Un trabajo en grupo que da lugar a un escenario en el que se dan cita más de un centenar de figuras vertebradas sobre un montaje acuático que dota a la escena del nacimiento de un gran dinamismo y una gran frescura.

A escasos metros de la sede de esta institución benéfica, en la inmediaciones de la calle Compañía, se alza el Museo Carmen Thyssen en cuyo vestíbulo se puede contemplar el belén de la archicofrafía de los Dolores de San Juan, que ha sido montado por miembros de esta corporación. Está formado por figuras de origen napolitano de terracota policromada, de 35 centímetros de altura, articuladas y ataviadas con ropajes propios del siglo XVIII.

Estas figuras representan el Misterio de la Natividad, la adoración de los Magos y pastores en diversas actitudes, así como distintos animales. En esta ocasión, el montaje elegido ha sido una recreación de la Natividad inspirado y ambientado en el cuadro La fuente de Reding, perteneciente a la Colección Carmen Thyssen y que se exhibe en la exposición permanente del Museo. La entrada para visitar el belén será libre en el horario habitual de la pinacoteca malagueña, durante esta Navidad.

La corporación del Viernes Santo no es la única cofradía de la ciudad que realiza el montaje de un nacimiento. La cofradía del Santo Sepulcro elige el salón de tronos de su casa hermandad (calle Alcazabilla, 5) para dar vida a su particular ciudad de Belén y se puede visitar en horario de mañana y tarde, salvo los días 24 y 31 que sólo abrirá por la mañana. También el espacio del salón de tronos de su casa hermandad (Camino de los Castillejos, s/n) es el lugar elegido, como novedad este año, por la cofradía de la Nueva Esperanza para mostrar su nacimiento en horario de 11:00 a14:00 y de 17:00 a 21:00

La pasada celebración de los cultos por el día de la Inmaculada Concepción sirvió como marco para que la archicofradía de la Esperanza bendijera su belén en un acto que tuvo como colofón el concierto de Navidad que tradicionalmente celebra la banda de música de la hermandad del Jueves Santo. Otra cofradía de la misma jornada, la hermandad de la Sagrada Cena, abre las puertas de su casa hermandad (Puerta Nueva, s/n) para que se pueda contemplar su nacimiento hasta el próximo día 5 de enero en turnos divididos por la mañana y por la tarde.

El Museo del Vidrio y el Cristal también apuesta cada año por un singular belén al que dan forma figuras de Lladró. En el montaje se pueden observar diversas escenas como El mensaje de la alegría o La huida a Egipto. Para poder visitar tanto la escena como la propia colección del museo, sólo hay que acercarse a la calle Gaona, número 20, en un edificio situado frente a la iglesia de San Felipe Neri, recientemente rehabilitada. El horario de este espacio es de martes a domingo de 11:00 a 19:00 y la entrada es gratuita.

Pero el centro histórico no es el único punto de la ciudad donde se puede proseguir con la ruta de belenes. Situada en el este de la ciudad, se encuentra la mítica barriada de La Mosca, ejemplo incondicional en esto de representar el nacimiento del Salvador, y además, lo hace a lo grande.

El nacimiento elaborado por este barrio situado el norte del Palo ha sido un ejemplo de evolución desde el comienzo de sus montajes que se remontan al año 1992, por iniciativa de un vecino, que descubrió un emplazamiento natural donde se estableciera un belén que tuviera grandes dimensiones, como era su intención.

Casi dos décadas después, sigue siendo un referente y una parada obligada en la ruta belenística alrededor de la ciudad. Realizado por la peña El Belén y situado en la calle Escritor Manuel Solano, se encuentra abierto al público hasta principios de enero. El horario de visitas es de 9:00 a 14:00 y de 16:30 a 00:00. Los días festivos se abrirá de forma continuada de 9:00 a 00:00.

Este nacimiento abarca una superficie que supera los treinta metros cuadrados y tiene una longitud de 15 metros. Una composición que alberga a más de 1.000 figuras, muchas de ellas artesanales, y que representan multitud de escenas y con distinta relevancia narrativa. En el proceso de su construcción se utilizan diversos materiales como barro, escayola, cemento o pintura. Como dato curioso de este nacimiento, cabe destacar que la arena utilizada en la escena está sacada de la propia montaña donde está enclavado el belén.

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