Dos supuestos ladrones han sido detenidos por la Policía Nacional por diversos hurtos tras introducir en vehículos de ciudadanos extranjeros un dispositivo que imitaba el sonido del maullido de un gato para poder robarles después de ofrecerse a rescatar al animal.

Los hurtos los cometían en zonas comerciales y del extrarradio de la localidad malagueña de Estepona y, según las primeras investigaciones, les hacían creer a las víctimas que un gato se les había metido en el motor de sus coches.

Seguidamente, uno de ellos se ofrecían para ayudarles a rescatar al animal y mientras tanto, el otro accedía al vehículo para sustraerles el bolso, según ha informado la Comisaría Provincial de Málaga.

Los supuestos autores elegían a sus víctimas entre ciudadanos extranjeros que llegaban a zonas comerciales, una vez que aparcaban el coche introducían en la parte del motor un dispositivo electrónico que imitaba el sonido del maullido de un gato.

Cuando el usuario volvía para recoger el vehículo, y una vez emprendida la marcha, comenzaban a oirse los maullidos del hipotético animal, momento en el que los ahora detenidos alertaban a la víctima de que quizás un gato se hubiese metido en el motor. Se ofrecían para ayudarles a rescatar al animal y mientras tanto, el otro accedía al interior del vehículo para sustraerles el bolso.

A los detenidos, de 42 y 52 años y nacionalidad argelina, se les acusa de tres hurtos. Uno de los arrestos se produjo en Málaga y el otro en Estepona y se da la circunstancia de que uno de ellos tenía en vigor una reclamación judicial dictada por un juzgado de la capital.

Las investigaciones se iniciaron en mayo, a raíz de la denuncia presentada por una ciudadana británica que explicó a la Policía Nacional que una vez que llegó a su vivienda y aparcó el coche en el garaje, le sustrajeron del interior del vehículo un bolso por dicho método.

Cinco días más tarde, un hombre de nacionalidad holandesa denunciaba otra sustracción, utilizando como distracción la posible ocultación de un gato en el interior de su utilitario. Unos días después, se presentó otra denuncia en relación al hurto de un bolso con la misma técnica de distracción.