Más de dos meses ha tardado la Junta de Andalucía en asignar plaza en un centro especializado a una discapacitada malagueña de 35 años, después de que un juez decretara su ingreso "urgente" el pasado mes de noviembre, ante el agravamiento de la enfermedad que padece. Será en Villanueva de Córdoba donde reciba los cuidados que precisa, por lo que los padres esperan que en cuanto haya una plaza disponible en la provincia de Málaga sea trasladada.

Antonio Sánchez, jubilado y de 72 años, es el padre de la enferma y asegura que el pasado viernes recibieron una llamada del personal de la Administración autonómica en la que le explicaron que en unos días recibirán la documentación para trasladar a su hija hasta el municipio cordobés. "Aún nos tienen que enviar la carta, esperemos que no tarde demasiado, porque dijeron que sería cuestión de días", comentó ayer. Por un lado se mostró contento de que por fin su hija va a estar atendida conforme a sus necesidades, pero por otro lado lamentó lo "lejísimos que está el centro que le han dado". "No podremos ir a visitarla todas las semanas, como mucho una vez al mes", concretó. Por lo que pone sus esperanzas en un posible traslado futuro a un centro malagueño, cuando haya disponibilidad de plazas.

Desde Bienestar Social explicaron que hay posibilidad de traslado, siempre que haya plazas

Los padres adoptivos de la mujer enferma se vieron obligados a acudir a la Justicia para reclamar su internamiento por la "situación desesperada" que están padeciendo, incapaces de hacerse cargo de los cuidados que precisa su hija, tras el empeoramiento de la enfermedad degenerativa que padece -enfermedad de Huntington-. Un auto del Juzgado de Primera Instancia de Málaga decretaba la necesidad de internamiento en octubre del año pasado, dadas las "graves circunstancias" en las que se encuentra la enferma. El historial médico de la mujer refleja una incapacidad del 91%, reconocida en el 2009, y los padres comentan que en la actualidad está enclaustrada en una habitación de la que no quiere salir y en la que recibe "con agresiones e insultos" a quien intenta darle de comer e incluso a las visitas que reciben. A esta situación se suma que tienen otro hijo de 15 años, con el que convive en el mismo domicilio. El pasado 17 de noviembre el mismo juzgado elevó el necesario internamiento a "urgente" a través de una providencia, pero no ha sido hasta ahora cuando le han sido asignado la plaza.

Desde la Junta de Andalucía explicaron ayer que la ley de protección de datos les impide facilitar detalles concretos de cualquier caso, pero sí que indicaron a nivel general el sistema de atención a la dependencia es regional y, por tanto, las plazas se asignan según la disponibilidad de las mismas en el conjunto de Andalucía. Y sobre todo teniendo en cuenta los requisitos y las necesidades concretas de la persona enferma, para que se le pueda prestar la mejor atención posible.

También aseguraron desde Bienestar Social que existe la posibilidad de traslado futuro a la provincia de Málaga, porque todos los casos son revisables. Pero que depende la disponibilidad de recursos; por lo que si no hay plazas libres para ese tipo de cuidados específicos no se podría acometer.