El Prisma

La endogamia del 'PSOE Concordia'

  • Deportes, Juventud, Medio Ambiente, Cultura, Obras Públicas, Urbanismo, Transportes, Seguridad... ¿Quién es el Leonardo da Vinci de la política andaluza? El coordinador del programa de Griñán

EL gaditano Luis García Garrido, profesor de Secundaria, ha sido prácticamente todo lo que se puede ser en la Junta de Andalucía, salvo presidente. Tras seis años como concejal en su pueblo, Sanlúcar de Barrameda (en tres de ellos también fue diputado provincial), su carrera en el Gobierno autonómico empezó en 1985, cuando fue durante un año director general de Juventud y Deportes. De 1986 a 1990 fue viceconsejero de Cultura, y de 1990 a 1994 de Cultura y Medio Ambiente. Tras pasar por la Dirección General de Comercio, Consumo y Cooperación Económica, García Garrido volvió a ser viceconsejero de Medio Ambiente (1996-2000), y viceconsejero de Obras Públicas y Transportes (2000-2008). Luego fue fugaz consejero del mismo departamento por menos de un año, hasta que Griñán formó su primer Gobierno, cuando fue relevado y enviado al Senado con cargo a la cuota del Parlamento andaluz.

Unos meses más adelante, en octubre de 2010, el político gaditano fue nombrado delegado del Gobierno en Andalucía, puesto que ocupó hasta la derrota electoral socialista el 20-N. Tras permanecer en funciones durante unas semanas, a finales de diciembre regresó al Senado, donde al parecer le reservaban el sillón. García Garrido es, además, secretario de Política Institucional del PSOE andaluz -desde luego debe de saber muchísimo de las instituciones públicas con semejante currículo- y el responsable de coordinar el programa electoral de Griñán, con el que los socialistas pretenden evitar el previsible descalabro en su último feudo.

Juventud, Deportes, Cultura, Medio Ambiente, Comercio, Consumo, Obras Públicas, Transportes, Urbanismo, Seguridad... De no ser por lo desapercibido que ha pasado en todos y cada uno de sus puestos, uno diría que nos encontramos ante un nuevo hombre del Renacimiento, y sorprende que un genio experto en tantas disciplinas sea luego un político gris. ¿O no ocurrirá acaso que los socialistas han ido colocando a un gestor político gris en infinidad de asuntos dispares? Quienes lo conocen aseguran que se trata de un hombre hipertrabajador, entregado a sus cargos y al partido, de una lealtad y unas convicciones socialistas inexpugnables, con una gran cabeza para coordinar equipos, controlar el trabajo interno y velar por el cumplimiento al máximo tanto del presupuesto como de la normativa, cosa que como sabemos no es muy frecuente en la administración autonómica. Sin embargo, se trata de la misma persona que, confrontado con los problemas de cómo regular el urbanismo en la Axarquía pero a la vez crear algún tipo de economía productiva con la que la comarca pudiera mantenerse, espetó al experto: "Esto es la Consejería de Obras Públicas, no la de Economía".

Por muy buen funcionario de la política interna que sea García Garrido -de su escasa mano izquierda y su rigidez dogmática todavía se acuerdan los presentes en una cena en Málaga cuando era delegado del Gobierno-, resulta sintomático que un hombre del régimen, que lleva casi 30 años en cargos institucionales, sea el responsable del programa de un partido que sufre de muchos males, pero especialmente del de la endogamia.

En Málaga esa patología se ha multiplicado en los últimos años. No ha habido miembro del aparato que no haya sido colocado ni díscolo que no fuera ajusticiado. Exceptuando a los consejeros, sólo los muy leales al aparato dirigido por Miguel Ángel Heredia y Francisco Conejo, parecen a salvo de la nueva y última catástrofe inminente. Todo apunta a que los socialistas se enfrentan a unos años a la intemperie de la oposición. Unos pocos elegidos con sueldos públicos no pasarán frío. Pero la gran mayoría tendrá que nadar por su cuenta tras la última maniobra de una dirección política que ha hecho del sálvese quien pueda su máxima todos estos años. El PSOE Concordia busca un nuevo capitán que lo reflote. No valen más Schettinos.

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