Un enfermero necesita de su título y de la colegiación para poder ejercer. Pero en la provincia hay unos 1.300 profesionales que trabajan en la sanidad pública y que no están colegiados. El Colegio de Enfermería de Málaga ha dado ya los primeros pasos para iniciar acciones legales contra la Delegación de Salud por "inactividad" al no exigir ese requisito.

El origen del problema data de 2001 y 2003. En esos años, la Administración autonómica aprobó dos leyes que eximían de la colegiación obligatoria a los profesionales que ejercían en el sistema público. El Gobierno central puso sendos recursos de inconstitucionalidad. En 2013, el Tribunal Constitucional emitió dos sentencias que tumbaron los artículos en los que se fijaba esa exención. La consecuencia es que en la actualidad la colegiación es obligatoria también en el ámbito público.

En junio de 2014, el SAS emitió circulares a los centros en las que aclaró que debían exigir la justificación de la colegiación. En Málaga, había unos 1.500 enfermeros que no estaban colegiados y en este tiempo han cumplimentado el trámite unos 180. El resto sigue sin cumplir ese requisito, según denunció ayer el Colegio de Enfermería.

"Más que una cuestión de números, es una cuestión de cumplimiento de la ley. Es grave porque es una Administración la que permite que ejerzan sin estar colegiados", dijo el presidente de la entidad colegial, Juan Antonio Astorga. El letrado de la institución, Francisco Sánchez, aclaró que el inicio de acciones contra Salud se debe a que "es el empleador el que debe velar porque el requisito de la colegiación se cumpla".

La asesoría jurídica ya ha remitido un escrito solicitando a la Administración sanitaria que requiera la colegiación a esos 1.300 enfermeros que no la tienen. Si en el plazo de tres meses el Colegio no obtiene respuesta, entonces interpondrá un contencioso administrativo "por inactividad".

Astorga hizo hincapié en que la colegiación "es una garantía" por dos aspectos. Por un lado, porque el ciudadano se asegura de que quien ejerce está realmente habilitado y, por otro, porque da una cobertura de responsabilidad civil ante posibles denuncias por una mala praxis. Además, calificó de "discriminación" que haya profesionales que están colegiados -que incluso pueden ser llevados ante un juzgado si son morosos con las cuotas- mientras que existen otros que no cumplen ese requisito que ya el Tribunal Constitucional ha considerado como obligatorio.

El Colegio de Enfermería de la provincia tiene unos 6.600 profesionales colegiados. Prácticamente tres de cada cuatro enfermeros que trabajan en Málaga lo hacen en la sanidad pública.