Unos 200 farmacéuticos de Málaga amparados por su colegio profesional denunciarán hoy, o a más tardar el lunes, al Ministerio de Sanidad ante la Audiencia Nacional. La causa es una orden ministerial de finales de 2008 que rebaja los precios de los medicamentos sin dar un plazo de adaptación para que los boticarios vendan los stocks adquiridos con anterioridad a un costo mayor. Esta decisión de la Administración supone una pérdida por depreciación de los fármacos almacenados de unos 2.000 euros por farmacia y a nivel provincial de 1.200.000 euros.

"Pero no es cuestión de dinero, sino de que queremos erradicar la inseguridad que genera esa situación", aclaró el presidente del Colegio de Farmacéuticos, Javier Tudela. Según explicó, debido a la orden que van a recurrir, el cambio de precios se produjo de un día para otro. Además, insistió en que los listados remitidos por el Ministerio con los nuevos precios eran incompletos y contenían numerosos errores. Los precios de los medicamentos no son libres, sino que están intervenidos por el Estado.

"No estamos en contra de la medida, sino de que no nos den tiempo para reaccionar y de que a los andaluces nos traten peor que al resto", abundó Tudela. El problema es que la orden repercute de forma especialmente negativa en Andalucía porque es la comunidad donde más se prescribe por principio activo (el nombre químico).

Hasta ayer a las 14:00, en torno a dos centenares de farmacéuticos habían presentado ya los poderes notariales ante el despacho de abogados de Málaga que representará a los afectados en el pleito. El lunes es el último día para recurrir la orden. Tudela precisó que es el tercer año consecutivo que los boticarios se topan con esta situación. "Y hemos decidido decir basta ya", concluyó.