La actual situación económica ha provocado que el número de personas que se platean estudiar unas oposiciones como su única salida laboral aumente. Ante los despidos masivos de la empresa privada y la dificultad para encontrar un puesto de trabajo con unas garantías mínimas de estabilidad, cada vez son más los malagueños que este mes de octubre se han planteado la opción de opositar. Porque lo cierto es que aunque el paro vaya en aumento, la Junta de Andalucía y el Estado convocan empleo público todos los años.

Así que las academias de Málaga que están especializadas en este tipo de oposiciones no tienen problemas para llenar sus clases y aunque no han experimentado un aumento sustancial de matriculados con respecto a años anteriores, sí han notado que el perfil del opositor está cambiando. Desde el Centro Preparador de Oposiciones de la capital explican que "si en épocas de bonanza económica los aspirantes venían buscando mejorar su situación laboral, ahora vienen estos y los que no tienen trabajo", asegura el profesor titular Jesús Ayala Almansa. Lo mismo ocurre con la academia Master-D, donde los desempleados o personas que temen por su puesto de trabajo han aumentado en el último año. Por lo tanto, si hasta ahora se podía hablar de dos tipos de opositores, el que tenía claro que quería opositar y el que tenía trabajo -que o bien lo dejaba o lo compatibilizaba con el estudio-, este año se une un nuevo perfil, el de los desempleados. Pero todos tienen algo en común, que buscan la estabilidad que da el empleo público. "La Administración aporta seguridad y unos derechos que la empresa privada no te da, unos derechos reales y no sólo sobre el papel", destaca Ayala en este sentido.

En el Centro Preparador de Oposiciones y en Master-D preparan, entre otras especialidades, para administrativo y auxiliar administrativo para el Estado, la Junta de Andalucía y ayuntamientos, auxilio judicial y tramitación judicial y policía nacional y aseguran que aún quedan plazas disponibles para algunas de ellas.

Por otro lado, Guillermo Castilla, que dirige la Academia Luis Vives, enfocada a oposiciones docentes, también ha notado cómo ahora acuden a su centro personas que teniendo una Ingeniería industrial se han planteado prepararse para ser profesor de Matemáticas ante la imposibilidad de encontrar un puesto de trabajo. Aun así, al tratarse de un centro de oposiciones para Magisterio y Secundaria reconoce que la mayoría de los opositores son "vocacionales". Por lo que los únicos cambios que nota es que el año que van a salir plazas para Magisterio el número de matriculados de esta especialidad aumenta, con respecto a las de Secundaria. Y al año siguiente pasa justo lo contrario.

De la misma opinión es el director de las Academias Unitec, Francisco Javier Onieva López, que asegura que las oposiciones de Magisterio y Secundaria, a las que este centro se dedica, no son como las de auxiliares administrativo, "que pueden tener un componente de estabilidad". "Tienen un componente vocacional", añade. No obstante, en Unitec sí han notado un posible repunte en la otra especialidad de oposiciones que imparten, Instituciones Penitenciarias, aunque Onieva lo achaca más al aumento de prestigio de la academia por el alto número de aprobados, que a un crecimiento en el número de opositores.

Por último, no hay que olvidar a los opositores que se preparan por su cuenta o aquellos que optan por la figura del preparador.