La Asociación de Empresarios Hosteleros de Málaga (Mahos) cuestiona abiertamente parte del articulado de la nueva ordenanza con la que el Ayuntamiento pretender ordenar la ocupación de la vía pública. En concreto, el documento de alegaciones formulado por el colectivo el pasado 21 diciembre, rechaza la propuesta de limitar la superficie que se autorice de terraza a un local al 75% de sus dimensiones. Un ajuste que, a juicio de los empresarios, tendrá efectos negativos que podrán incidir sobre "la contratación y la eliminación de puestos de trabajo". En esta misma línea, cuestionó que el Consistorio exija que en las calles peatonales quede siempre un espacio libre de 3 metros de ancho y de 4 metros cuando tenga preferencia peatonal. "Esta limitación va a suponer la desaparición de muchas de esas terrazas consolidadas en el tiempo", indicaron. Asimismo, estimaron "excesivas" las facultades que se otorgan a la Policía Local para, en caso necesario, ordenar la retirada inmediata de las mesas y sillas.

Por su parte, la Asociación de Vecinos Centro Antiguo formalizó sus sugerencias, considerando que el texto "abre la veda a la arbitrariedad y se preocupa ante todo de establecer un conjunto de normas que favorezca la instalación de los negocios de hostelería". Sobre ello, el colectivo mostró su preocupación por el hecho de que "plasme exclusivamente los intereses que defienden los empresarios de dicho sector e ignore la protección de los derechos e intereses de la ciudadanía".

Al tiempo, apuntan que "ratifica y legaliza el agravio comparativo y discriminatorio" en la regulación de los planes de aprovechamiento y "da vía libre a la parcialidad y la discrecionalidad" en sus numerosas referencias a posibles excepciones.