Málaga

13,905, un premio a más de 10 horas diarias de estudio

  • Marina Estrada García obtiene la mejor nota de la Selectividad

Marina, en Florencia, donde está de viaje con dos amigas.

Marina, en Florencia, donde está de viaje con dos amigas. / M. H.

“Más que agotarme, la Selectividad me generaba muchos nervios, como a todos, porque después de tanto esfuerzo, un día malo lo tiene cualquiera... Así que estoy contentísima. Ahora toca relajarse y disfrutar con los amigos y la familia. La satisfacción de ver este resultado después de estudiar todo un año no tiene precio”. Así ha comentado esta mañana Marina Estrada García su resultado en la prueba de acceso a la Universidad, en la que ha obtenido la mejor nota: un 13,905.

Esta mañana a las 9:15 le sonó el móvil mientras visitaba con dos amigas la Galería Uffizi, en Florencia. Su madre no sólo le informaba que había aprobado la Selectividad, sino que había sido la mejor. “El viaje por Italia era un premio a tanto esfuerzo, pero esta nota también es un premio”, ha afirmado.

Marina tiene 18 años y ya es ex alumna del colegio La Presentación, de El Palo, en la capital. En los últimos dos años de Bachillerato, entre la asistencia a clases, la academia de idiomas y el estudio le ha dedicado más de 10 horas diarias a prepararse el examen más temido.

Confiesa que desde que salió su nota, el grupo de Whatsapp de las compañeras del colegio echaba humo. Las otras dos amigas con las que está de viaje por Italia también han aprobado. “Todo el mundo está felicitándome. Cuando vuelva a Málaga lo celebraré con los amigos y la familia”, ha dicho.

Marina planea que hasta octubre se dedicará a ir a la playa y a pasárselo bien con los amigos. Pero no sólo eso. También proyecta tomar clases de inglés e impartirlas a niños más pequeños.

Esta joven de El Palo siempre ha sido una buena estudiante y ha sacado notas excelentes. “Pero la nota de corte siempre ejerce mucha presión y te puedes llevar una sorpresa”, manifiesta. En su caso, sí que se ha sorprendido, pero para bien.

Ya tiene claro lo que estudiará: Traducción e Interpretación en la Universidad de Málaga. Dice que lo tenía claro desde tercero de la ESO porque le encantan los idiomas. Pero se plantea compatibilizar esta carrera con otra. No ha decidido aún si será Relaciones Internacionales o Historia del Arte. “Ya lo miraré cuando vuelva a Málaga”, explica.

Marina es una adolescente como las demás. Le gusta salir con los amigos, escuchar música, leer, viajar... Pero también tiene un toque diferente. Desde hace un año es voluntaria de la asociación Debra que trabaja con afectados de la enfermedad piel de mariposa. Y es –como lo demuestra la nota que ha obtenido– muy exigente consigo misma. Dice que siempre se preparaba muy bien los parciales porque era la fórmula para llegar sin agobios a los finales. En síntesis, que la constancia da sus frutos.

Ahora disfruta los resultados de tanto esfuerzo con dos amigas dando un viaje por Italia a través de Interrail que iniciaron el pasado 16 de junio. Ya han visitado Roma, Siena y Florencia. La próxima parada es Milán. Después vuelven a Málaga. En entrevista telefónica desde tierras italianas, se notaba por su voz la inmensa felicidad que sentía: “He estudiado mucho y tengo dos premios. Este viaje por Italia y la nota de la Selectividad”.

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