La promotora malagueña Grupo Ñarucola acaba de cerrar la compra de la que hasta hace unos días era sede de la firma Meridiano (Grupo ASV) en Málaga capital con la intención de rehabilitar el interior del edificio y construir apartamentos en su interior. Si bien no ha trascendido el valor de la enajenación, los responsables de la entidad adquirente elevaron a unos 3,5 millones de euros el valor íntegro de la operación. La suma incorpora no sólo el coste de adquisición, sino también el valor estimado de los trabajos de adecuación del inmueble, el número 10 de la calle Olozaga, junto al Mercado de Atarazanas.

De acuerdo con los datos aportados ayer por la consultora Aguirre Newman, que asesoró a Meridiano en la venta, el edificio cuenta con 1.400 metros cuadrados, divididos en planta baja y tres de altura, mas un ático. Este activo era desde 1973 la sede social de Meridiano, empresa que forma parte del Grupo ASV, con mas de 80 años de experiencia y una gran expansión a nivel nacional, especialmente en Levante y Andalucía.

2-4Apartamentos. Son los que prevé materializar la empresa en cada una de las plantas del bloque

El gerente del Grupo Ñarucola, Jorge Rodríguez, explicó a este periódico que el planteamiento que tiene la compañía, activa desde 1991, es el de habilitar entre dos y cuatro apartamentos en cada una de las plantas. Al respecto, dijo que actualmente los técnicos están analizando las posibilidades reales y estudiando la adecuación del proyecto a las ordenanzas municipales.

"Ya estamos en marcha con esta actuación, la idea es empezar rehabilitando el local, de algo mas de 200 metros cuadrados, y empezar a mover el proyecto; los plazos van a depender de la administración, no es algo que vayamos a demorar", explicó Rodríguez. Grupo Ñarucola es una constructora/promotora que desde 1991 ha realizado mas de 2.500 viviendas y proyectos diversos en la provincia de Málaga y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Esta última operación inmobiliaria viene a sumarse a otra formalizada a finales del pasado año, también con Aguirre Newman como asesor, que implicó la venta del edificio número 10 de la calle Larios para albergar un hotel boutique de 4 estrellas. Este es el propósito de la empresa compradora, Obras Impala, que se hizo con la propiedad del edificio tras abonar 10,7 millones a la familia Gómez Raggio, anterior dueña.

Este inmueble tiene una superficie de 3.500 metros cuadrados, distribuidos en siete plantas. Todas ellas estaban destinadas hasta la fecha a oficinas en alquiler. El proyecto manejado por la firma adquiriente de este inmueble, construido en el año 1821, es el de ejecutar un hotel con 76 habitaciones, para posteriormente acordar su explotación con una cadena hotelera. Larios 10, con siete plantas, se levanta sobre una parcela de 687 metros cuadrados, dado a tres calles del casco antiguo de la ciudad: Marqués de Larios, Mesón de Vélez y Marín García. A principios del siglo XX albergó los almacenes Gómez Raggio, uno de los primeros de la ciudad junto a Félix Sáenz y Álvarez Fonseca, en la calle Nueva.