La densa niebla marítima, llamada taró en el lenguaje marino, ha invadido este viernes el litoral malagueña sin que dejé paso al sol. Y así seguirá, al menos, hasta media tarde y probablemente se vuelva a repetir mañana.

La razón de este fenómeno, habitual durante el verano en las zonas costeras, se debe a la anomalía cálida de casi ocho grados por encima de lo normal del aire que sobrevuela a la Península estos días. Y es que ese aire cálido está taponando el mar de Alborán y, al no haber vientos fuertes, hace que se forme esa niebla tan densa y que este viernes está situada a unos 200 metros de altitud, lo cual puede hacer que incluso precipite y es lo que se conoce como nubes meonas.

Mañana volverán a repetirse, aunque el Centro Meteorológico de Málaga advierte que probablemente se sitúen ya a 600 metros de altitud lo que facilitará que se despejen en torno al mediodía.

Mientras tanto, el interior de la provincia continúa en alerta amarilla por calor y se vuelven a esperar temperaturas cercanas a los 40 grados en Ronda y Antequera.