El temporal de viento sacudió ayer buena parte de la provincia de Málaga, dejando a su paso dos personas heridas, una de ellas de carácter grave, y un reguero de incidencias en las carreteras y el mobiliario urbano. El temporal estaba anunciado y la Agencia Estatal de Meteorología activó la alerta naranja ante la previsión de oleaje y vientos fuertes que finalmente superaron en algunos puntos los 90 kilómetros por hora. En el mar el viento sacudió las playas y varios chiringuitos de la capital sufrieron desperfectos en sus instalaciones.

El viento comenzó a soplar con fuerza sobre las 13:30, aunque los mayores envites se registraron sobre las tres de la tarde. Hasta las 17:00, el 112 había gestionado 112 incidencias, la mayoría de carácter leve, por caída de ramas y árboles, cornisas, chapas, cableado eléctrico y mobiliario urbano como farolas o señales.

A la caída de una palmera de grandes dimensiones en La Malagueta, que quedó empotrada sobre un coche estacionado, le siguieron otras en el paseo Antonio Banderas. En el paseo del Parque, la calle Pacífico o Tomás Escalonilla, Cañada del Tesoro, Avenida Lope de Vega, la calle Hilera o la Avenida de las Américas también sufrieron la caída de árboles.

Los sucesos más graves del día se registraron en la capital y en Fuengirola, con dos personas heridas. Pasadas las 15:00, una mujer que circulaba en bicicleta fue derribada por efecto del viento a la altura del paseo marítimo de Antonio Banderas de Málaga capital. La mujer, de 67 años y nacionalidad extranjera, permanecía ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Regional con pronóstico grave como consecuencia del traumatismo que sufrió en la cabeza. Los médicos estaban valorando anoche la posibilidad de intervenirla, según fuentes sanitarias. A la herida en Málaga se sumó otro lesionado en Fuengirola, cuando el viento arrancó la tapadera de un depósito de agua, que terminó impactando en la cabeza de un transeúnte.

Junto a estos incidentes de carácter grave, los bomberos y la Policía Local se emplearon a fondo para evitar más heridos. Sobre las 15:00, agentes de la Policía Local de Málaga cortaron el tráfico en el Paseo marítimo Pablo Ruiz Picasso ante la caída de una farola sobre la carretera. El viento derribó también parte del muro del instituto García Lorca, en la capital, que cayó sobre un coche aparcado en las inmediaciones. El Palacio de Ferias y Congresos también se vio afectado con el desprendimiento de varias placas metálicas de la fachada sin que se registraran heridos

En el centro de la ciudad, los desprendimientos mantuvieron en alerta a los servicios de emergencia durante varias horas. Los bomberos cortaron un lateral de la calle Larios ante el desprendimiento de una ventana. Cerca de ese punto, este servicio retiraba el toldo de un comercio que se había desprendido en parte y amenazaba con caer sobre la vía. Las incidencias llegaron a la calle la Térmica, donde el viento provocó el desprendimiento de un tejado de aluminio.

La mayoría de las emergencias se concentraron en la capital, donde hoy también se esperan rachas fuertes de viento que en principio no se esperan tan fuertes como las del domingo. En numerosos puntos de la ciudad las calles y aceras recogieron numerosas ramas y árboles, elementos de cornisas, chapas, cableado eléctrico, señales de tráfico, toldos, pérgolas y vallas publicitarias. El centro de coordinación de emergencias del 112 recibió múltiples avisos por el riesgo que suponían estos elementos. El Ayuntamiento de la capital decidió activar el plan parcial de emergencias a las 16.00 horas debido al nivel naranja decretado por la Agencia Estatal de Meteorología de fuertes vientos y fenómenos costeros en la provincia.

Aunque los mayores problemas se registraron en la capital, en la provincia se localizaron una veintena de incidentes, especialmente en los municipios de Fuengirola, Torrox, Vélez-Málaga, Benalmádena y Mijas, los más afectados por este temporal. El derribo parcial de un muro de piedra afectó a una furgoneta en la calle Pablo Romero de Fuengirola, de la zona de los Boliches. Además, en Benalmádena-Costa, el viento llegó a desplazar el techo de cristal de un restaurante en el paseo marítimo. Numerosos curiosos se acercaron a las zonas cercanas a la playa para contemplar los efectos del fuerte oleaje, que llegó a alcanzar los cuatro metros de altura en puntos de la capital. La policía Local obligó a algunos curiosos a abandonar las zonas de los paseos marítimos ante el peligro que suponía acercarse en exceso a la costa.

El temporal de ayer, que previsiblemente seguirá hoy, es el segundo que vive la provincia este año. El pasado día 8, un fuerte descenso de las temperaturas acompañado de precipitaciones dejó una capa de nieve en zonas del interior de la provincia y alcanzó a los Montes de Málaga, provocando además importantes problemas en las carreteras.