El temporal que ha azotado la provincia malagueña durante la pasada semana ha tenido sus efectos económicos en el Puerto de Málaga, que tuvo que estar al menos 48 horas cerrado al tráfico. Esto ha generado pérdidas valoradas en hasta 200.000 euros, según fuentes portuarias.

El colectivo más afectado ha sido el de los estibadores quienes, debido al mal tiempo, se han quedado sin descargar varios barcos. Sus pérdidas rondan los 120.000 euros. Durante este fin de semana, al menos dos portacontenadores, según confirman desde la TDS, cambiaron su ruta ante la imposibilidad en entrar en Málaga. Uno marchó rumbo a Tánger y otro a Cagliari. Además, al menos otros dos buques se vieron obligados a retrasar su entrada y estuvieron dos días fondeados en la bahía malagueña, con pérdidas que rondan los 80.000 euros.

Las líneas regulares también sufrieron contratiempos. El día 13 suprimieron sus salidas y el resto de jornadas llegaron con retrasos y necesitaron de la ayuda de los remolcadores para entrar y salir del Puerto. Los vientos de levante complicaron las operaciones, pues llegaron a provocar olas de hasta dos metros de altura en la misma entrada del recinto portuario malagueños. Según Meteorología, la situación tiende a mejorar en los próximos días.