"¡Muchas gracias a todos! Soy muy feliz, es un honor llevar los colores del Málaga. La historia comienza...". Son palabras de Paul Baysse de noche, en su casa, tras haber tenido un día muy intenso. Escritas en español, guiño que deja claras sus intenciones y que aportan sensatez tras una actitud algo extraña durante su fichaje. Llega su momento.  

El zaguero es el segundo fichaje del Málaga esta temporada, aunque el primero que anuncia el club a bombo y platillo. El primero, cronológicamente, es Adrián, a quien confirmó públicamente Francesc Arnau pero cuyo anuncio no llegará hasta dentro de unos días. La incorporación del francés se había dejado prácticamente enjaretada el lunes, aunque faltaba el test definitivo, pasar el reconocimiento médico. Se sometió a él a primera hora de la mañana en el Vithas Salud Rincón Medical Center Rosaleda y todo fue bien, aunque la redacción de los documentos tardó más de la cuenta y el club no pudo soltar el anuncio hasta ya por la noche.

Pero la jornada salió a pedir de boca. Le esperaba al defensa francés un análisis exhaustivo porque había sufridos sendas roturas de ligamentos en las dos rodillas. A sus 29 años, revisar bien estas cuestiones es fundamental para evitar sustos a lo largo de la temporada. Baysse, que llegó con un talante afable y dicharachero, respondió bien a las diferentes pruebas y a media mañana ya tenía el ok sobre la mesa. Almorzó con el director deportivo y poco después se fue de vuelta a Francia con el único agente con el que vino -su familia se quedó en casa empezando a preparar la mudanza-. Como el resto de integrantes de la plantilla, está convocado el próximo miércoles para comenzar la pretemporada con las pruebas médicas, por lo que no será hasta la semana que viene cuando pueda ser presentado públicamente.

La sub 21 se metió en la final, así que los anuncios de Sandro y Meré se demoran

El ya exjugador del Niza firma por tres temporadas con opción a una cuarta -en función del número de partidos jugados- y en torno a él se espera vertebrar una defensa férrea. El club confía en su solvencia y dotes de mando para ser ese líder que se viene buscando desde que la rodilla derecha empezó a apartar a Weligton del día a día blanquiazul. Llevar la operación a buen puerto ha costado más de lo que en un principio se pensaba Arnau, pero tanto él como Míchel están convencidos de que puede ser un pilar importante en el proyecto de la próxima temporada, de ahí el esfuerzo -económico y de horas de trabajo para convencerle- invertido en las últimas semanas para llegar al punto que ayer se confirmó.

El 50% del trabajo de planificación de la defensa está completado. Ahora todos los esfuerzos se concentran en terminar de convencer a Jorge Meré, quien ayer volvió a ser titular en el eje de la zaga con la selección sub 21 en las semifinales contra Italia. Habrá que esperar a que acabe el Europeo para que su futuro se aclare.

Si se convence al ovetense y se termina de dar forma a la cesión de Borja Bastón, los principales retos que tenía por delante el Málaga en este mercado de invierno se habrán conseguido -queda por hacerse oficial el traspaso de Roberto desde el Espanyol, aunque la operación está bajo control y se espera comunicar en cuestión de días-. No obstante, no podrá ser hasta que el Everton deposite los seis millones de euros de la cláusula de Sandro cuando se puedan producir todos estos anuncios. El canario también jugó ayer ante Italia, por lo que habrá que esperar al menos hasta el sábado, día después de la final, para que se confirmen los movimientos.