Las últimas noticias provenientes desde la enfermería comienzan a dar una tregua. Ya tocaba. Tal y como se preveía, Diego Rolan comenzó a ser uno más en los entrenamientos. Y, por otro lado, la visita de Kuzmanovic a Suiza para ver qué ocurre con su sóleo izquierdo le dejó mucho más tranquilo, pues no hay vinculación ninguna con el tendón de Aquiles, que echó por tierra su pasada temporada.

El delantero cedido por el Girondins volverá a ser cabeza de cartel ante el Deportivo. Y bien que hace falta, pues los problemas ofensivos y de cara al gol se siguen evidenciando jornada tras jornada. El charrúa, de hecho, es el único futbolista de Míchel que ha marcado en juego, los demás tantos han llegado en acciones a balón parado.

Kuzmanovic, en cambio, se quedó trabajando en el gimnasio, pero ya con la mente más relajada tras saber que su lesión es únicamente muscular. Sucede que está tardando en volver más de lo esperado en un principio, así que irá dando pasos seguros antes de reintegrarse al grupo con los demás.

La situación del centrocampista cedido por el Basilea presenta tintes similares a los de Miguel Torres. Se esperaba que estos días el lateral madrileño llevara una hoja de ruta muy similar a la de Rolan. No obstante, todavía no se halla al 100% e irá alternando gimnasio y trabajo con el recuperador, Hugo Camarero. No obstante, esta misma semana debería ser uno más y apurar cartuchos para estar disponible contra los gallegos.

El gran asterisco lo pone Recio. No por temas físicos, sino por esa quinta amarilla que vio en Villarreal y que le privará de estar en el choque. El Málaga intentó cambia ese destino presentando alegaciones ante el Comité de Competición, si bien fueron desatendidas y tendrá que descansar este domingo. Se abre así un casting para ver quién acompaña a Adrián en el doble pivote. La opción natural es la de Rolón, pero Míchel no anda especialmente satisfecho con el rendimiento del argentino en esa demarcación.