Quince meses después de que las obras del Parque de Bomberos de Nerja acabasen, sigue sin entrar en servicio. Un nuevo retraso, del que el edil responsable de esta área en el Ayuntamiento, Óscar Jiménez (PSOE) responsabiliza a la Diputación Provincial de Málaga, responsable del proyecto. Ahora, es por las modificaciones que los bomberos solicitaron a ambas instituciones en el edificio. "Para inaugurar el nuevo Parque de Bomberos, aprobada la parte administrativa en tiempo y forma por este Ayuntamiento, es necesario que la dirección de obras apruebe los modificados de la parte técnica. La pelota está en su tejado, nosotros estamos a la espera de que Diputación quiera abrir el nuevo Parque", indicó Jiménez, tras "las numerosas quejas de los bomberos y los vecinos ante los retrasos de su apertura".

"El Ayuntamiento ha hecho sus deberes y somos los primeros interesados en que el nuevo Parque de Bomberos se inaugure y poder darle un buen servicio a Nerja", recalcó el edil quien aclaró que las modificaciones propuestas por los profesionales que ocuparán el edificio fueron asumidas por el Consistorio nerjeño "siguiendo las indicaciones de la Diputación Provincial" que finalmente no les impuso ningún recargo económico. Éste se haría a cambio de la cesión de las actuaciones instalaciones del retén ubicado junto a la rotonda de Burriana y que irían destinadas a la Agrupación de Protección Civil. El nuevo parque de Bomberos de Nerja se ha construido en una parcela con una superficie de 3.631,66 metros cuadrados, junto a la rotonda de acceso principal a la autovía del Mediterráneo A-7.

La inversión total del proyecto, llevado a cabo por la empresa Sando, supera los 1.234.612 euros, cuya financiación corre a cargo del Ayuntamiento de Nerja, en un 40 por ciento, y la Diputación Provincial de Málaga, que ha aportado el 60%. Las obras de este equipamiento provincial comenzaron en 2015 y tenían un plazo de ejecución de doce meses.