El Ayuntamiento de Campillos, tras los problemas que se vienen produciendo con el abastecimiento de agua en la red pública desde hace dos semanas, ayer decidió realizar un reparto de 70.000 litros de agua en las zonas del municipio que se encuentran más afectadas, en especial, en la parte alta de la localidad. Allí, sus vecinos estaban agotando las reservas que guardaban en cubos, baños o aljibes, ya que muchas viviendas cuentan con los mismos, por lo que dos camiones con agua potable se encargaron de reponer, al menos en parte, las reservas existentes mientras los depósitos municipales se recuperan por el exceso de consumo que se está produciendo y la imposibilidad de reponer todo el agua que se consume con los actuales recursos e infraestructuras disponibles, según explicó el alcalde del municipio, Francisco Guerrero.

Mientras tanto, hoy se volverá a realizar otro reparto de agua con camiones por diferentes puntos de la localidad y durante la noche se cortará el agua en la zona baja del municipio, lo que se espera que permita una más rápida recuperación del nivel del depósito municipal.

A todo ello, la actividad económica también comienza a verse afectada, ya que algunos bares han tenido que cerrar por la falta de agua y otros han tenido que restringir al mínimo el uso de las reservas que tenían en sus depósitos particulares. "Está siendo complicado, hemos tenido que estar haciendo las cosas con un hilo de agua", explicaba uno de los propietarios de uno de los bares situados en una de las barriadas afectadas por la falta de servicio.

Por su parte, los vecinos también explicaban que hacer la vida diaria se está volviendo un problema, debido a que tareas como poner la lavadora o ducharse no pueden hacerse. "Es un alivio", decían unos vecinos tras recibir agua de los camiones, aunque se preguntaban si la situación continuaría mucho tiempo así porque sería muy difícil poder llevar una vida normal. "Ya me dirás si tenemos que estar dependiendo de un camión cisterna", dicen. También las zonas de servicio se vieron afectadas y se tuvieron que cerrar los aseos o el servicio de limpieza de coches con agua a presión.

De momento, los afectados recibieron un pequeño alivio en la complicada situación que se está produciendo, aunque pidieron a las autoridades responsables que se tomen medidas para conseguir una solución definitiva a los problemas que padece el municipio con el suministro de agua. Mientras tanto, desde el Consistorio insisten en pedir un uso responsable del agua, al tiempo que explican que se están tomando medidas para tratar de normalizar la situación, como el no permitir el llenado de las piscinas con agua potable, habiendo establecido un servicio para hacerlo con agua de pozo.

Por otra parte, también se prevé realizar inversiones para renovar parte de la red principal, aunque se apunta a los continuados problemas que se producen por la antigüedad de la misma.