Unos 40 vecinos del Barrio de San Francisco, la mayoría de ellos hosteleros, acudieron ayer a la sesión plenaria celebrada e el Ayuntamiento de Ronda para expresar su malestar y protesta por el corte de tráfico que se produjo en el Puente Nuevo de Ronda.

Los vecinos que tomaron la palabra mostrar un total desacuerdo con la medida adoptada desde el Gobierno local desde el viernes al domingo, con motivo de la disputa el pasado sábado del Homenaje a la Legión, una prueba deportiva que reunió a unos 2.500 participantes.

Los empresarios aseguraron haber sufrido pérdidas importantes a causa de la restricción de la circulación y acusaron al Gobierno local que no haber consensuado la misma como se habría comprometido en una reunión con los vecinos.

"No estamos en contra de que se corte, pero cuando tengamos una alternativa", señaló Francisco, uno de los empresarios que acudió a la sesión.

En un tono similar que mostró el resto vecinos y empresarios, que exigieron primero alternativas antes de cortar la circulación por el monumento, rechazado cualquier tipo de cortes antes de disponer de las mismas.

Además, apuntaron a la posible pérdida de puestos de trabajo que podría producirse si se mantienen este tipo de cortes en determinadas fechas y exigieron que se explique si la misma medida se tomaría en Semana Santa. "¿Estáis pensando en los puestos de trabajo que pueden perderse?", apuntaron.

Mientras tanto, la alcaldesa de la ciudad, Teresa Valdenebro, negó que dicha medida se hubiese tomado con la intención de perjudicar a ningún vecino y aludió a motivos de seguridad y de organización de la prueba.

Por otra parte, aseguró que las medidas que se tengan que tomar con respecto al plan de movilidad en el conjunto histórico se decidirán en la mesa que se creó a tal efecto y que está integrada por 38 colectivos, por lo que garantizó que será de manera consensuada. Eso sí, puso sobre la mesa la necesidad de conservar el Puente Nuevo, "la joya de la corona".