Provincia

La nueva cárcel de Archidona ya tiene sistemas para el agua

  • El Ayuntamiento y la SIEP firman el convenio para ceder las instalaciones construidas para dar el servicio

Exterior de la entrada de la cárcel de Archidona.

Exterior de la entrada de la cárcel de Archidona. / javier flores

El Ayuntamiento de Archidona y la Sociedad de Infraestructuras y Equipamiento Penitenciario (SIEP), han firmado un convenio para el abastecimiento de agua del futuro centro penitenciario que se ha construido en el término municipal de esta localidad. En el documento se describen las diferentes infraestructuras que se han construido para garantizar el abastecimiento, la cesión de la gestión y mantenimiento al Consistorio y el compromiso municipal de dar agua de la red cuando sea una realidad el trasvase desde el pantano de Iznájar, un proyecto que se encuentra todavía en la vía administrativa y que viene siendo reclamado por los alcaldes de la zona como una solución a medio y largo plazo para los problemas que está provocando la sequía para poder mantener el servicio de agua a la población.

Una vez sea efectivo dicho trasvase, que no tiene fecha, el pozo de captación que se ha realizado en estos momentos quedará como reserva para casos en los que en caudal proveniente del pantano no pueda llegar a ser suficiente para atender las necesidades de la población de Archidona y del propio centro penitenciario, que dependerá de la ocupación.

Desde la SEIP se explica que han sido realizado un pozo, dos tuberías para trasladar el agua, una hacia desde la captación y otra desde el depósito municipal, y una planta potabilizadora. Unas instalaciones que se acuerda ceder al Ayuntamiento para su gestión y mantenimiento, lo que también permitirá llevar agua a los núcleos urbanos Fuente el Fresno y Haza Galera. No obstante, la propiedad de la planta potabilizadora, al encontrarse dentro del recinto penitenciario, no será cedida al Consistorio.

Finalizadas estas infraestructuras, el centro ya cuenta con uno de los servicios fundamentales para poder abrir sus puertas, y es que desde el Consistorio se había advertido que no podía suministrar desde la red pública el caudal de agua potable que necesita la futura cárcel al no contar sus pozos de captación con las reservas necesarias.

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