El partido ultraortodoxo Shas ha anunciado que no formará parte del gobierno que trata de formar la ministra de Exteriores, Tzipi Livni, a la que deja en serias dificultades para lograr la mayoría parlamentaria.

"Hemos presentado propuestas para resolver la pobreza en Jerusalén, pero no las han aceptado", dice un comunicado del partido Shas con el que justifica su decisión de interrumpir las negociaciones políticas y quedarse fuera de la coalición gubernamental.

Según la nota de prensa, "no podemos desentendernos de las dificultades y necesidades que estos días aparecen en el informe de los estados desarrollados, y que sitúa a Israel en el primer lugar de la escala de pobreza".

"Por lo tanto, no podremos formar parte de la coalición", concluye.

El Shas, que tiene once diputados en la Kneset (Parlamento), negociaba desde hace tres semanas con el partido Kadima, que preside Livni, su incorporación al gobierno que debe sustituir al del primer ministro Ehud Olmert, que dimitió el pasado 21 de septiembre por sospechas de corrupción.

En las últimas negociaciones, la nioche del jueves, los negociadores de Kadima insistieron en que no pueden satisfacer la demanda de más de 1.000 millones de shékels (unos 258 millones de dólares) en ayudas a niños que exigían los ultraortodoxos, y que la decisión era de ellos.

El viernes, el Consejo de Sabios del Shas resolvió, en votación telefónica, que prefieren mantenerse al margen y salir del ejecutivo.

La resolución de los religiosos pone en serios aprietos a la primera ministra nominada, que se ve con el apoyo de sólo 55 de los 120 diputados del parlamento.

Este jueves, en una comparecencia ante el grupo parlamentario de Kadima, Livni anunció que el domingo se entrevistará con el presidente israelí, Simon Peres, para darle a conocer la situación y afirmó que, después, "la opinión pública conocerá si vamos a elecciones" anticipadas.

En principio los comicios generales en Israel se deberían celebrar en 2010.