El fin del trabajo de Aldo Ceccato como director titular de la Orquesta Filarmónica de Málaga (OFM) se producirá oficialmente este fin de semana con la interpretación en el Teatro Cervantes del último concierto de abono de la presente temporada, mañana y el sábado, con un programa dedicado íntegramente a Tchaikovsky. La despedida tendrá el tono amargo de todos los adioses, pero tendrá, además, un componente añadido de polémica: y es que, si bien en dicho programa figuraba la obra del compositor malagueño Rafael Díaz Tchaikovsky entre nosotros, encargada por la OFM, finalmente la pieza ha sido retirada del mismo después de la negativa de Ceccato a dirigirla.

El propio Rafael Díaz explicó ayer que su obra contiene "un componente teatral importante, ya que se pide al director que entre con un periódico debajo del brazo y que desde la tarima proceda a la lectura de una información imaginaria. Se trata de una especie de crónica a posteriori del propio concierto, que los músicos van comentando en voz alta mientras el director la lee. En ella se cuenta que el propio Tchaikovsky aparece en el teatro para escuchar el concierto, detalle que da título a la obra, y termina afirmando que las composiciones de Rafael Díaz y Tchaikovsky cosecharon un gran éxito de público y crítica". Según Díaz, fue este último punto el que provocó la negativa de Ceccato a dirigirla, "ya que lo consideró una presunción que nada tiene que ver con la música". El milanés incluso "alabó la partitura, y aunque toda la parte teatral tampoco le hizo mucha gracia lo que definitivamente no aceptó fue que se hablara de un éxito de crítica y público antes del propio concierto. Yo le propuse varias soluciones, hasta hacerlo todo yo mismo en el escenario, pero él siguió negándose en redondo", explicó Díaz, quien eximió de toda responsabilidad a la Orquesta Filarmónica, "ya que la responsabilidad es únicamente de Ceccato". El compositor llegó a afirmar que obras como la suya "le vienen muy largas a Ceccato" por su carácter contemporáneo, e incluso criticó la labor del director, "que se encuentra en absoluta decadencia", al frente de la OFM.

Para contrastar las declaraciones de Díaz, este periódico se puso ayer en contacto con Aldo Ceccato, quien sin embargo declinó hacer declaraciones al respecto y se limitó a expresar su voluntad "de marcharme de Málaga de la manera más elegante posible". Tampoco quiso Ceccato hacer valoración alguna sobre su paso por la OFM durante los últimos cinco años.

Sin Ceccato, tal y como ya informó este periódico, la Orquesta Filarmónica de Málaga afronta la elección de un nuevo director titular, para la que ha decidido tomarse el plazo de una temporada completa, durante la que la tarima estará ocupada exclusivamente por directores invitados. Precisamente, se espera para los próximos días la presentación de la temporada 2009 / 2010, en la que se evitarán los monográficos (Ceccato ha dividido sus cinco años en la OFM en dos grandes monográficos dedicados respectivamente a Beethoven y Tchaikovsky) y en la que los programas prestarán especial atención a las corrientes musicales gestadas desde el Romanticismo hasta el siglo XX. También para los próximos días se espera la presentación del Festival de Música Antigua, organizado por la propia OFM, y que este verano llegará a espacios nuevos, como la iglesia de San Julián.