Cultura

Charo Ema muestra su "sorpresa" por la posible gestión privada del Echegaray

  • La directora del Teatro Cervantes aseguró ayer que ya había trabajado en la programación del recuperado espacio y que conoció la intención del Ayuntamiento por la prensa · "Ya no hago planes", afirmó

La posibilidad de que la gestión del recuperado Teatro Echegaray pase a manos privadas, actualmente estudiada por el Ayuntamiento de Málaga según confirmó a este periódico el delegado municipal de Cultura, Miguel Briones, ha significado un giro inesperado no sólo para buena parte de la ciudadanía sino para algunos cuya posición y oficio les mantenía especialmente unidos a este espacio escénico. La directora del Teatro Cervantes, Charo Ema, se mostró ayer "sorprendida" por la noticia y aseguró que supo de ella por la prensa, a pesar de que, desde su incorporación al primer coso malagueño el pasado octubre, la extensión de sus actividades como gerente al renovado Echegaray ya estaba prevista.

En un desayuno compartido con periodistas de la ciudad, Ema explicó incluso que ya había "manejado la posibilidad de contratar distintos espectáculos de ópera y teatro, no sólo para la inauguración [prevista para después del próximo verano] sino para la primera temporada"; sin embargo, una vez conocidas las intenciones del Consistorio, "ya no hago planes". La directora esperaba contar con el Echegaray, "un espacio espléndido que ofrecía una salida de calidad para muchas actividades que no pueden hacerse actualmente en el Cervantes", pero ayer apuntó que se limita a esperar la decisión última del Ayuntamiento: "Si optan por que lo gestionemos nosotros, lo haremos; si no, lo acataré, aunque lo lamentaré porque necesitamos con urgencia más espacios".

Ema señaló que ya el pasado mes de diciembre explicó al consejo de administración del Cervantes "que necesitábamos más dinero para gestionar el Echegaray", a pesar de que los recortes del presupuesto municipal ya se habían fijado en el 23%, aproximadamente un millón de euros anuales. "El problema es que, si no podemos contar con el Echegaray, seguiremos teniendo el mismo problema de masificación; ocurre como con el Teatro Albéniz: cuando termine su reforma nos gustaría gestionarlo, al menos en parte, pero si el Ayuntamiento decide que no, a ver qué hacemos con la programación de teatro infantil que celebramos allí los domingos por la mañana", explicó Ema.

De hecho, el rompecabezas que supone la programación del Cervantes ha significado uno de los mayores retos de Charo Ema al frente del mismo desde su llegada, especialmente ahora que se dispone a culminar sus propias ofertas. La directora indicó que hasta ahora "se han venido ofreciendo menos espectáculos de danza y lírica de lo que resultaría razonable, dado el gran éxito de público de estas ofertas; el problema es que montar una ópera cuesta mucho dinero, así que haremos lo que podamos". Con respecto al uso social que del Teatro Cervantes hacen distintos agentes en fechas señaladas como carnavales y Semana Santa, además de las diversas galas benéficas que se organizan a lo largo del año, Ema explicó que comprende "la importancia de este tipo de tradiciones, pero necesitamos organizarnos para caber todos", e indicó que preferentemente destinará este tipo de actividades a los lunes, martes y miércoles, ya que el resto de los días de la semana "son fundamentales para nuestra taquilla". En cuanto al Festival de Cine Español, que dirige Carmelo Romero y cuya próxima edición se celebrará del 17 al 25 de abril, Ema admitió que hasta que el ciclo no disponga de una sede y una organización propias "tendremos que llegar a un acuerdo: ahora nos sentimos como dos siameses separados".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios