El rumor venía cociéndose desde hacía días, pero ayer se hizo oficial nada menos que en la presentación de la Guía Michelin en Bilbao. Dani García no mantendrá su restaurante Calima en el Hotel Gran Meliá Don Pepe de Marbella la próxima temporada. En su lugar, se trasladará a otro emblema de la restauración marbellí, el Hotel Puente Romano, donde abrirá un nuevo establecimiento que, previsiblemente, llevará por nombre Dani García. La noticia pilló por sorpresa al mundo de la gastronomía española y se hizo pública ayer, justo cuando se revelaba el nuevo reparto de estrellas. Lo cierto es que, dada la premura, Calima (que cerró, como acostumbraba a hacerlo cada curso, el pasado mes de octubre, aunque definitivamente no lo hará en abril de 2014, cuando cada año volvía a abrir sus puertas a sus comensales) sigue figurando en la Guía con sus dos estrellas. Todo apunta, no obstante, a que el nuevo restaurante del cocinero, y como es norma, perderá este estrellato cuando se haya inaugurado; aunque tampoco resulta difícil sospechar que no le resultará difícil recuperarlo.

Fuentes cercanas a las dos partes informaron recientemente a este periódico de que Dani García y el Gran Meliá habían roto sus relaciones por cuestiones económicas. Málaga Hoy preguntó al propio chef al respecto el pasado viernes y García lo negó. Ayer, otras fuentes del ámbito de la gastronomía malagueña admitieron que desde hacía al menos una semana se venía barajando el rumor sobre un traslado de Calima, aunque el hermetismo en todo este tiempo ha sido absoluto, y la negativa de García rotunda. Lo cierto es que este hermetismo ha cosechado sus frutos y ha permitido al cocinero mantener las dos estrellas Michelin para Calima cuando éste ya no volverá a hacer gala de su espléndida carta, al menos en el mismo lugar de siempre. El de Dani García fue incluido ayer en la presentación de la Guía entre tres "casos especiales sucedidos al cierre de la edición de 2014" junto al cierre de Can Fabes en Sant Celoni y la marcha de Diego Guerrero de El Club Allard en Madrid.

García, que inaugurará el próximo miércoles 27 su nuevo restaurante en el Aeropuerto de Málaga (Dani García Deli Bar), donde ya regentó La Moraga que posteriormente fue traspasada, y que ganó su primera estrella Michelin en el restaurante Tragabuches de Ronda, ha señalado siempre a Calima como su proyecto más personal. Su mayor proyección internacional, no obstante, le ha sido propiciada gracias a su dedicación a las tapas y a la apertura de su restaurante Manzanilla en Nueva York. Consagrado como uno de los mayores valores de la cocina española, garante tanto de la innovación como de la tradición, Dani García cambia ahora de piel. Habrá que probarlo.