El 1 de abril de 1980, los entonces desconocidos Einstürzende Neubauten debutaron en un mugriento local del Berlín occidental, el Moon Club. Esta noche, a las 21:00, más de 28 años después, la banda que lidera Blixa Bargeld llega al Teatro Cervantes como una prestigiosa banda de vanguardia, lo que siempre ha sido y parece que nunca dejará de ser, a juzgar por Alles wieder offen (2007), el álbum que les trae a Málaga. Es todo un salto.

Los de Blixa Bargeld han prometido llevar al Cervantes una turbina de avión, y usarán un arsenal de cubos de plástico y otras percusiones junto a los tradicionales guitarras y bajos eléctricos. Así es Einstürzende Neubauten. Sus procesos de trabajo nada tienen que ver con las de las otras bandas de la escena rock. El grupo alemán ha autoproducido su disco sin contar con discográficas. De hecho, han sufragado los costes con las donaciones de los aficionados, quienes además participaban en el proceso creativo escuchando al instante lo que Einstürzende hacían en el estudio y aportando su opinión e incluso instrucciones sobre lo conseguido. Esta iniciativa autogestionaria la han realizado desde una web muy interactiva (www.neubauten.org).

Estos Edificios Nuevos Que Se Derrumban, que es lo que significa Einstürzende Neubauten, son hoy día cinco tipos experimentados: Blixa Bargeld (guitarra, voz, dirección musical), Alexander Hacke (bajo), N. U. Unruh (percusiones), Jochen Arbeit (guitarra) y Rudolf Moser(metales). Bargeld es el auténtico motor de la banda, y el único miembro fundador además de Unruh, cuyo nombre real es Andrew Chudy.

Uno de los malentendidos asociados a Einstürzende Neubauten es su condición de proyecto paralelo o banda menor. Para muchos, esa era la naturaleza de la banda. La razón del error vino por la vinculación, durante años, de Blixa Bargeld a los Bad Seed de Nick Cave -incluso compartían cada de discos, la indie Mute-. El líder del grupo alemán aportó las aristas y el riego a gran parte de la discografía del australiano, pero desde 2003 esa relación está rota.