Cultura

Escritores y familiares celebran el 83 cumpleaños de Rafael Pérez Estrada

  • Personalidades de la cultura leerán su escrito favorito del autor para rendirle homenaje

Sede de la Fundación Rafael Pérez Estrada en la Casa Gerald Brenan de Churriana.

Sede de la Fundación Rafael Pérez Estrada en la Casa Gerald Brenan de Churriana. / m. h.,

La Fundación Rafael Pérez Estrada celebra mañana 16 de febrero el 83 aniversario del nacimiento del escritor y pintor malagueño. Para ello ha organizado en su sede, de la Casa Gerald Brenan de Churriana, una lectura de sus textos, a partir de las 18:30. Diversas personalidades del mundo de la cultura han elegido su escrito favorito de Pérez Estrada y así le rendirán homenaje, leyendo su obra, recordando el ingenio de una de las figuras claves de la literatura española.

El acto contará con la presencia de la familia de Rafael Pérez Estrada. Dos de sus hermanos: Esteban y Víctor han escogido los textos: Mi tío el levitador del libro El muchacho amarillo; El levitador e Historia de un hombre de El levitador y su vértigo; y Sombras de El libro de las horas. Entre los escritores que participan en el acto estarán los miembros del Consejo Asesor de la Fundación: Mark Aldrich, José Infante, Francisco Ruíz Noguera, Antonio Soler, Juvenal Soto y Alfredo Taján. También intervendrán María Eloy García, Guillermo Busutil, Violeta Niebla, Angelo Nestore, José Antonio Quesada, Carlos Pranger o Pedro Ramos, además de músicos, periodistas y gestores.

Rafael Pérez Estrada nació en Málaga el 16 de febrero de 1934, hijo del que fuera médico y alcalde de la ciudad Manuel Pérez Bryán (1943 y 1947), y de la conocida pintora Mari Pepa Estrada. Estudió Derecho a la Universidad de Granada, (1954), formación que le permitió ejercer la abogacía con gran prestigio en su ciudad natal. En 1959 se marchó a Madrid donde se inició en el dibujo, colaborando en revistas y emisoras de radio. Allí, compaginaría su labor profesional con la pintura y poesía.

En 1960 volvió a Málaga definitivamente. Llegó tardíamente a la literatura, pues en 1968 apareció su primer Valle de los galanes, al que siguen numerosos títulos de teatro, poesía y narrativa de vanguardia. Hasta 1997, año en que abandona su despacho, combina su actividad como abogado con la escritura y el dibujo, siendo a lo largo de su vida un referente local inestimable, pues participó muy activamente en eventos claves de la vida social y cultural malagueña, entre otros, en la creación del Centro Cultural del 27.

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