El Teatro Calderón de Valladolid acogerá el próximo viernes el estreno de la obra de Alberto de Casso El ciclista utópico, que tras ser premiada en 2014 con el Premio de Literatura Dramática que convoca este mismo teatro, se presentó ayer con la subida a las tablas como verdadero galardón. Los actores Fernando Soto y Fran Perea -que también coproduce la obra por medio de su productora Feelgood- dan vida a dos personajes creados por el madrileño Alberto de Casso y dirigidos por Yayo Cáceres para recrear las relaciones personales de dos hombres que tienen vidas antitéticas y que se ven unidos por un accidente de tráfico.

Este montaje es fruto de la coproducción entre el Teatro Calderón, Feelgood y Emilia Yagüe Producciones, pero tiene su origen en el Premio de Literatura Dramática que convoca cada dos años la Fundación del teatro vallisoletano. "Un premio con sentido común", apuntó el autor de la obra, convencido de que los galardones que existen no evitan la "frustración" de ver cómo una pieza teatral que merece galardones finalmente no acaba representándose. De hecho, este autor, distinguido con el Premio Lope de Vega entre otros, reconoció sentirse "aburrido de presumir" de premios que son objeto de "gran orgullo" inicial, pero que llevan a la "frustración" de la falta de producción.

De Passo sólo dibujó para la adaptación "dos líneas rojas": el final "era intocable" y el mantenimiento de los espacios y la estructura de la narración. Sobre la obra y el estreno, De Passo confió en que los espectadores tengan la "suficiente dosis de crueldad y mala baba" como para poder reirse de determinadas circunstancias que se desencadenan en la trama de esta historia. El director de la obra, el argentino Yayo Cáceres, destacó la conexión y buen trabajo conjunto realizado por el autor, los productores, los actores y él mismo para crear una atmósfera basada en la "simbiosis muy extraña" entre los dos personajes.