Siete días a la semana y casi, como cantaban The Kinks, All day and all of the night. El Museo Picasso Málaga abrirá sus puertas todos los lunes durante los meses de julio y agosto, de manera que ni una sola jornada veraniega encontrarán sus visitantes las puertas cerradas. Con ello, según informaron fuentes cercanas a la pinacoteca, se pretende aprovechar la masiva afluencia de turistas que se espera en la capital para el verano, ya que la Costa del Sol será, presumiblemente, una de las áreas más beneficiadas por la convulsa situación en los países árabes mediterráneos en lo que a la elección de destinos de ocio se refiere. El Picasso sienta así un precedente importante en la ciudad en lo que se refiere a la presencia activa de los museos, en un periodo en el que, especialmente a partir de mediados de julio, la oferta cultural suele quedarse considerablemente mermada. Con esta iniciativa, además, la pinacoteca del Palacio de Buenavista se suma a otros museos españoles que apuestan por la misma medida con la vista puesta en el turismo y su desembolso.

Para dotar de contenido a este periodo veraniego sin días de cierre, el Museo Picasso inaugurará el próximo 20 de junio dos nuevas exposiciones temporales: la primera, Viñetas en el frente, procedente del Museo Picasso de Barcelona, mostrará hasta el 2 de octubre el compromiso ético y artístico asumido por Pablo Picasso, como persona y como artista, frente a las circunstancias históricas por las que atravesaba su país en 1937, con dos aguafuertes de la serie Sueño y mentira de Franco como vértices decisivos. Hasta el 25 de septiembre se podrá visitar la segunda muestra temporal, Picasso crea. A través de la cámara de David Douglas Duncan, centrada en el proceso creativo de Picasso, su estudio y aspectos de su vida cotidiana mediante imágenes captadas por el objetivo del fotógrafo entre 1956 y 1961.